
Desde hace una semana se realizan operativos antiinmigrantes en la carretera federal México-Laredo a la altura de San Agustín Tlaxiaca e Ixmiquilpan, para detener a migrantes centroamericanos que van de paso rumbo a la frontera norte.
La vía federal es un paso obligado para miles de auto transportistas que se dirigen a cualquier parte de la fronte norte de México que limita con los Estados Unidos y muchos migrantes han utilizado esta vía cumplir su propósito de alcanzar territorio norteamericano.
De ahí que, como parte de las revisiones, el personal del INM, detiene autobuses, camiones de carga así como tráileres en cuyas cajas se han encontrado en otros momentos a decenas de migrantes.
Otros puntos donde ya se observa el recrudecimiento de las acciones de vigilancia para detener a migrantes son las vías internas de comunicación como la Pachuca-Tula, también a la altura del COBAHE de San Agustín Tlaxiaca donde se han apostado los policías con elementos caninos para detener a los migrantes.
Además, en la mayoría de los municipios de la región Tula-Tepeji, especialmente Tula, Tlaxcoapan, Tlahuelilpan, además de Huichapan, por donde pasa el tren también se reporta un incremento de los recorridos de las fuerzas federales con apoyo del Instituto Nacional de Migración (INM).
Mientras tanto, en la sede de este organismo nacional, con un poco de miedo los migrantes se acercan para tramitar sus solicitudes de asilo, pues una cosa tiene muy clara, no regresaran a sus países de origen y han decido quedarse en México.