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La desesperación de un gobierno en quiebra

Hoy jueves se asestará un golpe a la ciencia, la investigación, la cultura, los derechos humanos y el deporte con la desaparición de 109 fideicomisos que Morena pretende eliminar para recaudar dinero a la hacienda pública y usarlos de forma discrecional.

Si algo extraño no sucede hoy, los rubros arriba mencionados quedarán en el aire, lo que incluso puede costar pérdidas humanas, tan solo para que la bancada de Morena entregue ese dinero al presidente y a la #4T, para que éstos lo repartan como les plazca.

Cualquiera que tenga una noción de administración de finanzas sabe que un tipo que vendió la idea de no tener patrimonio, de traer un Tsuru, no manejar tarjetas de crédito ni cuentas, como una bandera de austeridad, solo demuestra sus capacidades como administrador.

De acuerdo con López, los fideicomisos están llenos de opacidad y malos manejos y que quienes los utilizan no son fiscalizados, no rinden cuentas. Otra mentira que, de tanto repetirla a sus “fieles” se convierte en verdad.

Ya este gobierno se ha terminado, ha saqueado los fondos de reserva, como lo dijo en bonitas palabras el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, y ya el dinero no alcanza para los caprichos del presidente, como la refinería, el tren maya y sus “mascotitas” (como el propio López se refiere a ellos), a las que hay que darles de comer para que corran a las urnas en el próximo proceso electoral.

Que no se engañe a nadie, antes de la pandemia, antes de la crisis, el gobierno se estaba quedando sin dinero.

Si revisamos la información, el año pasado, cuando las cuentas no salieron, se ocupó la mitad del Fondo de Estabilización de Ingresos Presupuestarios, para cuadrarlas y hoy ya no hay de donde obtener más y “adiós a los guardaditos”, como declaró Herrera.

Así que, por elecciones presupuestales fuera de la lógica, una recaudación deficiente, o simplemente por pensar que ahí estaba el dinero, pues simplemente se esfumó y ahora sí, con la crisis de la pandemia, pues menos.

Así que hablar de opacidad en el manejo de los fideicomisos es ocultar ésta y otras verdades para salir del paso.

Apenas llevamos dos años de Obradorismo y se está acabando con lo poco o mucho que se hizo bien de los gobiernos anteriores y al día de hoy no tiene absolutamente nada que presumir y al ritmo que van, se van a terminar con el patrimonio del estado.

El gobierno pretende recaudar 68 mil millones de pesos al acabar con los fideicomisos y ese dinero, créanmelo no va a aliviar los efectos de la crisis sanitaria y económica, viene a fortalecer los intereses personales y electorales del presidente.

Mario Delgado, coordinador de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados, dijo que con la extinción de esos fideicomisos se obtendrá una cifra de 68 mil millones de pesos.

Ni dentro del propio gobierno están de acuerdo con esta medida, pues son ya varias las voces que se oponen a la desaparición de algunos fideicomisos, como por ejemplo la Secretaría de Gobernación, responsable de la operación del fideicomiso del Fondo para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, advirtió que esta figura no debe desaparecer y subrayó que el plan de extinción contradice acuerdos y análisis previos.

Esta petición tiene el respaldo de la Junta de Gobierno del Mecanismo para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, integrada el Consejo Consultivo Ciudadano; la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), la Fiscalía General de la República (FGR), la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SsyPC), la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) y la propia Secretaría de Gobernación (Segob).

Actualmente el mecanismo protege a mil 304 personas, 418 periodistas (111 mujeres y 307 hombres) y 886 defensoras de derechos humanos (471 mujeres y 415 hombres).

Otra voz dentro de Morena es la de Rocío Barrera, diputada Federal dijo que, de avalarse en el Pleno la desaparición de dicho fideicomiso dejaría en la indefensión a mil 300 personas que ya se encuentran amparadas con este mecanismo, además de las que pudieran sumarse en el futuro.

Es aquí y en algunos otros donde el capricho y la desesperación de un gobierno deficiente cobre vidas humanas, como lo ha hecho durante el manejo de la pandemia.

Y por el estilo la ciencia, el deporte, la investigación, el cine… ¿Qué pensarán ahora aquellos personajes de estos rubros que fueron obradoristas a morir y que hoy ven como su “mesías”, les va a terminar asestando una puñalada rastrera?

Hoy, la mayoría de Morena, nos darán muestra que lo que quiere el presidente es una lealtad ciega, el “estás conmigo o contra mí” (como ya lo dijo públicamente), la horda de sirvientes hará realidad el capricho del presidente y asegurar su futuro político, lo que no saben es que ser leal a un hombre, es traicionar a México a un pueblo, a un país. Solos se van a evidenciar que no les interesa el pueblo, les interesa su jefe.

Aquí el giro de la historia será que, si se mantienen los fideicomisos, será por la división que existe en Morena, porque parece que algunos se están dando cuenta que no es por ahí la cosa, que la lealtad ciega a un hombre, es traición a la patria.

Mientras tanto veremos con cuantas mentiras se puede sostener un país en quiebra.

Tiempo al tiempo.

@hecguerrero

Héctor Guerrero

Periodista. Director en @politicamx @TiempoReal_mx y @losfuertes.mx Adicto a la información. Apasionado y en línea con los deportes y la política. México

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