En 1998, en el salón gobernadores de la antigua casona de la Corregidora, sede del Poder Ejecutivo de Querétaro, compartieron un desayuno el entonces gobernador de Querétaro, Ignacio Loyola Vera y el niño Felipe Fernando Marcía Olvera, era el niño gobernador.
23 años después, la vida volvió a cruzar a los dos personajes: Macías y Loyola como diputados federales panistas por Querétaro, el primero recién reelecto, el segundo de regreso de un semiretiro político para combatir las ‘ocurrencias’ del gobierno federal.
En Querétaro, desde hace más de 30 años, cada 30 de abril, se conmemora el día del niño con un concurso que, con sus variantes, se puede denominar ‘Los Niños en el Gobierno’.
En 1998, siendo Ignacio Loyola mandatario del estado, el certamen se llevó a cabo y, mediante, un proceso de selección entre estudiantes del sexto año de todas las escuelas primarias del estado, se eligió al ‘Niño Gobernador’ que, en esa ocasión fue el entonces estudiante de 12 años, Felipe Macías Olvera.
Ese día, el primer gobernador panista de Querétaro escuchó a un niño que pedía más compromiso de los políticos y más atención a la niñez.
Al paso de los años, con más experiencia, más años y más recorrido político, uno y otro coincidieron, a partir de este 1 de septiembre y por los próximos 3 años, serán vecinos en la cámara de diputados.
“Tocó ser compañero de curul de nuestro ex gobernador @iloyolavera durante nuestra toma de protesta como Diputados Federales en la #LXVLegislatura @Mx_Diputados” publicó Macías Olvera el pasado domingo, cuando se tomó protesta a los integrantes de la sexagésima quinta legislatura federal.