- Predominan prejuicio y ceguera. Prohíbe un superalimento, fuente de energía y agente eficaz contra el cambio climático.
- Lejos de favorecer, entorpece industrias que necesita nuestro país.
Mariana Larrea, experta legal en materia de salud y regulación sanitaria de la firma Santamarina + Steta señaló que el dictamen del Senado para reglamentar cannabis sobre-regula y entorpece el surgimiento de industrias muy benéficas para el país, por estar cargado de desconocimiento y prejuicios que –por una- han estigmatizado al resto de una familia de plantas que no son drogas.
“No es justo que una planta milenaria que nos puede dar tanto, este siendo regulada como droga. Que no podamos distinguir entre marihuana y cáñamo por prejuicios heredados hace más de 100 años, impulsado por la industria del papel y el algodón en el Congreso de los Estados Unidos. Los mexicanos estamos perdiendo mucho con este dictamen”, dijo.
La especialista explicó que sin el prejuicio ni su prohibición, el cáñamo ofrece un mundo de posibilidades comerciales e industriales al país, mucho más allá de lo que conocemos: oportunidades de inversión extranjera, empleos, desarrollo de la industria alimenticia, cosmética, medicinal, de construcción, bio-plásticos y biodiesel, entre las principales.
Mariana Larrea señaló que los principales estigmas de quienes regulan, con mucha falta de conocimiento, están en el artículo 198 del Código Penal Federal, que impone prisión a quienes siembren, cultiven y cosechen cualquier tipo de cannabis. “No podemos pretender emitir una regularización del cannabis, sin antes haber eliminado la criminalización impuesta en el CPF”, subrayó.
Un segundo estigma está en que los legisladores consideran a cannabis como una substancia controlada, definida bajo el término de estupefaciente, cuando solo es una de las variedades de esta familia. “Es como confundir un limón con una toronja, ambos cítricos, pero no podemos tratarlos por igual. La cannabis no es una substancia, la cannabis es el nombre científico dado a la planta de la familia de la cannabacea, dentro de la cual podemos encontrar muchas especies y subespecies de esta familia, incluyendo al cáñamo como una subespecie de la familia de la cannabis sativa”, explicó.
Mariana Larrea consideró que legisladores y autoridades necesitan ayudar a los emprendedores de la industria agroalimentaria tan necesaria en esta pandemia, además de que es el único sector que no ha dejado de creer. “El cáñamo es un alimento milenario alto en fibra, contiene Omegas, vitamina E. Es una proteína súper completa, tiene los aminoácidos esenciales para ser absorbida por el cuerpo humano, es una gran fuente de proteína vegetal y de fácil digestión. Contiene altas cantidades de magnesio, manganeso, potasio y fósforo. También conocido como ‘hemp’, tiene mucho más proteína que la propia soya, y se cree que tiene más omegas que la linaza. Es de más fácil digestión que éstas últimas, ya que no todas las personas digieren bien la soya o la linaza, además de ser un gran alimento bajo en carbohidratos”, aseguró.
La experta finalizó con un mensaje a legisladores: “Es importante cuidar a la sociedad pero también a la sociedad productiva que nos da oportunidades de trabajo y bienestar”.
