En febrero de 2014 los diputados de la LVII Legislatura del Estado aprobaron una reforma al Artículo Tercero Constitucional al que agregaron el Párrafo Sexto, en el que se obliga las entidades de la administración pública estatal a crear un Código de Ética que regule sus actividades.
Los diputados queretanos integran un Poder al margen de la legalidad constitucional, una casta para quienes la carta magna del estado no aplica. Las leyes que ellos crean para ellos no aplican. Durante 3 años y medio han violado el Artículo Tercero de la Constitución Política del Estado sin que por ello haya consecuencias.
El 24 de febrero de 2014 los diputados integrantes de la LVII Legislatura del Estado aprobaron una reforma al Artículo Tercero Constitucional al que agregaron el Párrafo Sexto, en el que se obliga a todas entidades de la administración pública estatal a crear un Código de Ética que regule sus actividades, mismo que fue publicado el 4 de abril de ese año en el Periódico Oficial del Estado ‘La Sombra de Arteaga’.
“En el Estado de Querétaro el Gobierno se sustenta en el valor de la ética, por lo que todos los entes Públicos cuentan con un Código de Ética, mediante el establecimiento de una adecuada política, la creación de un comité de ética formalmente constituida y de la realización de la capacitación y difusión en dicho valor”.
Para ello, tenía como plazo un año para que cada organismo público lo tuviera.
El primero en crear su Código de Ética fue el Poder Judicial, quienes ya lo tenían aprobado desde el 30 de enero de 2014 y fue publicado en ‘La Sombra de Arteaga’ el 11 de abril de 2014, una semana después de publicada la reforma constitucional local.
El 30 de junio de 2016, el Poder Ejecutivo del Estado hizo lo propio.
Sin embargo, 42 meses después de que fuera publicada la obligatoriedad constitucional de contar con un Código de Ética y 2 años y medio después de que se venciera el plazo para hacerlo, el Poder Legislativo, el mismo que determinó que fuera obligatorio, sigue al margen de la norma constitucional queretana.
Incluso, en estos 3 años y 6 meses se han presentado 3 iniciativas para la creación del Código de Ética del Poder Legislativo sin que ninguna de ellas entrara, siquiera, a trámite legislativo, aunque en 2012 la LVII Legislatura lo incluyó como parte de la agenda común de todos los grupos parlamentarios ahí representados.
En 2013, el diputado Marco Antonio León Hernández presentó la ‘Iniciativa de Ley que crea el Código de Ética Parlamentaria de la Legislatura del Estado de Querétaro’, de la cual lo único que se supo es que estaba en análisis por los integrantes de la Junta de Concertación Política para hacerle aportaciones.
Actualmente, los diputados de la LVIII Legislatura local tienen en la congeladora 2 iniciativas para la creación de Código de Ética que los regule. El primero fue presentado por la diputada priista Ma. Antonieta Puebla Vega el 4 de mayo de 2016 ante la Oficialía de Partes del Poder Legislativo. La segunda, la presentó la panista Aydé Espinoza González el pasado 17 de agosto de 2017.
En su exposición de motivo, la legisladora Puebla Vega refiere que, en el caso del Poder Legislativo, “nos encontramos frente a una norma ausente, a una omisión legislativa que estamos obligados a subsanar, pues (este) Poder debía de contar con un Código de Ética y un Comité de Ética”.
La ‘Iniciativa que crea el Código de Ética Parlamentaria’ presentado por la priista Ma. Antonieta Puebla Vega se encuentra estancado desde el 16 de mayo del año pasado en la Comisión de Gobernación, Administración Pública y Asuntos Electorales que preside la diputada panista Ma. del Carmen Zúñiga Hernández.