Los TocablesMirador

Los apagones del bienestar

De los creadores del gran éxito de 1988 “Se cayó el sistema”, viene para ustedes “Estado operativo de alerta en la red eléctrica nacional”.

Así es, el verdadero, auténtico y original PRIAN, encabezado por quien compuso el himno del PRI en Tabasco, tiene al país hoy con jornadas de apagones intermitentes a lo largo del país que afectan a millones de personas, en estos días, dos de cada tres estados en el país han sufrido cortes parciales del servicio eléctrico.

Hoy la república Bolivariana de Dinamarca, antes conocida como México se encuentra en una emergencia por crisis en el suministro de energía eléctrica.

Tlaxcala, Hidalgo, Puebla, Tamaulipas, Oaxaca, Chiapas, Nuevo León, Sonora, Coahuila, Chihuahua, Querétaro, Guanajuato, Sinaloa, Nayarit, Aguascalientes, San Luis Potosí, Edomex, Morelos y Ciudad de México, pero bueno, son los apagones del bienestar”.

Los apagones, se han vuelto una tradición en el gobierno de López desde el inicio de su sexenio, sobre todo con la época de calor y, dentro de la misma tradición incluye el “no pasa nada”, “exageran” y el clásico de clásicos, “es un sabotaje de nuestros adversarios”, o que tal que, desde el 2018 dice que los apagones “no se van a volver a repetir”,

Sin duda un campeón en el lavado de manos.

«Se rescató a la CFE, no hay ningún riesgo de apagones, no va a faltar energía eléctrica incluso en circunstancias difíciles como las nevadas, tenemos la opción de usar desde carbón hasta agua, pasando por gas, combustóleo y energía nuclear, tenemos de todo».

Eso dijo hace unos meses y lo mismo dijo ayer cuando se le cuestionó sobre el tema.

Lo cierto es que la falta de nueva oferta de centrales eléctricas de generación, aunado a la baja inversión en la capacidad de transformación y transmisión por parte de la Comisión Federal de Electricidad (CFE); situaciones que ponen en entredicho la confiabilidad del Sistema Eléctrico Nacional y el dinamismo económico del país.

En México, el sistema de generación eléctrica está en crisis, pues el mismo presidente reconoció que no se invirtió lo necesario ni siquiera les causó algún tipo de preocupación.

Para muestra un botón, lo que ha hecho este gobierno con tal de “dejar huella”, siempre convierte todo lo que toca en algo inservible, apenas se eliminó el horario de verano y pues todos sabemos que una hora menos de luz en la tarde, demanda mucho mayor de energía eléctrica.

Más que Dinamarca, cada vez nos parecemos más a Venezuela.

Iberdrola le vendió al gobierno federal 13 plantas de generación eléctrica (más de la mitad de su negocio en México), por 6 mil 200 millones de dólares.

Es decir compró esas plantas que ya generaban electricidad para la CFE y, ¿Cuánto ganamos en generación de energía eléctrica por esas plantas? CERO.

Iberdrola agradece al gobierno mexicano esa inyección de capital y el deshacerse de esas plantas eléctricas.

Lo cierto es que el aumento significativo en la demanda de energía eléctrica, exacerbado por olas de calor récord, ha evidenciado que el sistema eléctrico nacional apenas se mantiene a flote.

De acuerdo con datos oficiales del Programa Nacional de Desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional, revelan que la demanda eléctrica aumentó alrededor de 10 por ciento en 2023, mientras que la generación eléctrica solo ha crecido uno por ciento.

El nacionalismo rancio, la estatización de la generación energética es la responsable de la actual crisis eléctrica, no han sabido manejar, una muestra más de la ineptitud de este gobierno, que aparte de comprar plantas a sobreprecio, la CFE ha puesto trabas a la inversión privada, ha retrasado la entrada en operación de nuevas plantas y mejor ni hablamos de proyectos a fututo porque simplemente no existen.

Y en cuanto a lo necesario para la transmisión y distribución de la energía, tampoco han hecho nada, pues está limitado al estado.

Toda la revolución eléctrica que prometió la 4T, encabezada por Manuel Bartlett, anunció la construcción de centrales eléctricas, además de la creación del parque solar en Puerto Peñasco y, obviamente nada de esto ha sucedido.

La CFE tampoco ha ejecutado proyectos de infraestructura de transmisión y distribución, un segmento del negocio que sólo la compañía puede participar.

La crisis energética se suma a la violencia a la del agua, a la de salud y seguridad y no hace más que confirmar el desastre que ha sido este gobierno.

El apagón más descarado y evidente es el de cerebro de este régimen que gobierna hoy.

A ver si el dos de junio no nos salen con que hay un apagón.

Así los apagones del bienestar, próximamente en su colonia.

Tiempo al tiempo.

@hecguerrero

Héctor Guerrero

Periodista. Director en @politicamx @TiempoReal_mx y @losfuertes.mx Adicto a la información. Apasionado y en línea con los deportes y la política. México

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