Los municipios poblanos de Coronango, Cuautlancingo y San Andrés Cholula recaudan anualmente millones de pesos por concepto de saneamiento de aguas residuales municipales, pero las condiciones del agua que vierten al río Atoyac aún no cumplen con los requerimientos previstos en la Declaratoria de Clasificación de los Ríos Atoyac y Xochiac.
Por ejemplo, en Cuautlancingo, donde no hay una planta de tratamiento registrada ante la Comisión Nacional del Agua (Conagua), obtuvieron más de 20 millones de pesos por este concepto.
En el 2018 ese ayuntamiento recaudó 6.3 millones de pesos, para el 2019 el monto subió a 7 millones y para 2020 disminuyó a solo 4.7 millones de pesos. Sin embargo, para mediados del 2021 ya acumulaba una recaudación de 5.9 millones de pesos.
San Andrés Cholula logró contabilizar más de 15 millones de pesos por este mismo concepto, pese a que el municipio carece de infraestructura que permita garantizar un servicio de saneamiento óptimo y así reducir los niveles de contaminantes en el río Atoyac.
En el 2018 recaudaron 3.7 millones de pesos, para 2019 fueron 5.6 millones, en 2020 la suma fue de 4.8 millones y hasta la mitad del 2021 ya acumulaban ingresos por este concepto de 1.4 millones de pesos.
En tanto Coronango mostró un comportamiento extraño en la recaudación del servicio de saneamiento.
En respuesta a una solicitud de transparencia, el gobierno municipal informó que en el 2018 solo ingresaron 61 mil 517.65 pesos, para 2019 subió a 691 mil 938.41 pesos y al año siguiente, en el 2020, ya obtuvieron 2.6 millones de pesos.
En tanto al corte del 31 de julio del año pasado el monto por saneamiento alcanzó los 2.5 millones de pesos, prácticamente la misma cantidad de lo recibido todo el año anterior.
Este municipio, según la Conagua, tampoco cuenta con una Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) Municipales.
