La representación de la crucifixión de Jesús el viernes santo, es una de las celebraciones más populares en las fechas santas, prácticamente todos y cada uno de los municipios del estado de Querétaro y del país, cuentan con la propia, haciendo gala del arraigo de la fe católica, las costumbres y las tradiciones que dictan el andar de nuestra sociedad.
Municipios como Tolimán, Corregidora y el Marques son algunos de los municipios que, a nivel estatal, cuentan con representaciones del viacrucis con mayor popularidad en todo el estado, dando cita a miles de personas que vienen incluso de otras latitudes a disfrutar del montaje de la Pasión de Cristo; sin embargo, nada de esto sería posible, sin todos aquellos que de manera voluntaria son partícipes de la dramatización, que se ve enriquecida por los talentos y la convicción de muchos de estos actores, en su mayoría aficionados.
La Búsqueda Divina
Representar a Jesús, es un reto que pocos quieren asumir, pues a pesar de no ser extenso en líneas teatrales, si requiere de mucha preparación, tanto física como espiritual, un ejemplo claro de la dificultad para encontrar a aquel hombre que quiera fungir como hijo de Dios, es el caso de la representación de la Cañada, en donde, este año se emprendió la búsqueda por un “nuevo” Jesús para lo cual, audicionaron 8 actores, siendo al final Jesús Pastor Ramírez el elegido para esta ardua labor.
Jesús Pastor, es originario del municipio de El Marques, es Ingeniero en mantenimiento industrial y actualmente labora para el Instituto Mexicano del Seguro Social, labor que, como cada año, mezcla con su pasión por la actuación y su gran fe religiosa.
“Representar a Cristo para mí es un compromiso muy grande en todos los sentidos, ya que como católico siempre he tratado de vivir a semejanza de Cristo; sin embargo, para estar ahí no solo se necesita eso, la preparación física es muy extensa” nos cuenta Jesús Pastor, quien ya había participado anteriormente en el papel de Pedro, “Todos los días hago ejercicios cardiovasculares , acompañados de una buena alimentación y gimnasio por las noches, estar ahí, pondrá a prueba mi resistencia física y mental y debo estar preparado”.
Aunado a esto, tanto Jesús Pastor como los demás integrantes de la representación acuden a una preparación espiritual y religiosa en la que, a través del estudio de la biblia, buscan entender a la perfección lo que están representando.
“Nosotros somos una forma de evangelizar y para mi es un gran compromiso, pues puedo ser a través del papel de Cristo un gran ejemplo para muchos, además no solo se trata de la cuestión religiosa creo yo, también se trata de rescatar las tradiciones del pueblo y ser un orgullo para mi familia, quienes, no está de más mencionar, están más nerviosos que yo, pero son libres de venir o no venir, por los sentimientos que pudiera generarles verme en esas condiciones”.
El viacrucis de la Cañada se celebra el viernes santo, y durante la representación, Jesús Pastor y cada uno de los actores que a lo largo y ancho de la republica representan a Cristo, son sometidos al duro trato que implica realizar con profesionalismo el papel que aceptaron: latigazos, insolación, el peso de la cruz y el arduo camino hasta el calvario, son solo algunas de las circunstancias por las cuales, estos vehementes católicos pasan y por las que merecen todo nuestro reconocimiento.
“Yo invito a la gente a que venga a vivir el viacrucis y que entiendan que esto no es una fiesta sino un tiempo de reflexión, vengan a La Cañada que aquí serán bienvenidos”.