Estudiantes de la Licenciatura en Criminología, de la Facultad de Derecho, desarrollaron Cámaras de Cianoacrilato Portátiles, para obtener huellas dactilares a un bajo costo y con alta empleabilidad en las prácticas de campo de los alumnos de las asignaturas de Criminalística Básica, Sistemas de Identificación, Dactiloscopia, Elaboración y exposición de informe, Presentación de material probatorio y Criminalística de Laboratorio.
Al respecto, la responsable del proyecto, Maria Yajaira Alvarez Monjaraz, explicó que el objetivo principal es impulsar el desarrollo de habilidades teórico-prácticas entre los alumnos de la Licenciatura en Criminología, pues esta herramienta fue elaborada para despertar el interés por la investigación en las Ciencias Forenses.
“Debido a que actualmente en el mercado existen estos artefactos, pero a un costo muy elevado, se realizó este equipo para cuestiones académicas en las que el costo de fabricación es menor”, argumentó la estudiante de Criminología.
Las Cámaras de Cianoacrilato Portátiles son auxiliarles en el revelado de huellas dactilares y la plastificación de las mismas para que se pueda realizar el levantamiento sin que se pierda el registro.
Para su funcionamiento, primero, se debe colocar dentro de la bolsa un círculo de control, en el cual se colocará una huella digital que será la guía para saber sí ya alcanzó el tiempo de revelado que tarda aproximadamente 15 minutos.
“Los usuarios deben usar un traje de seguridad que consiste en un cubre bocas, guantes y lentes. Además, se colocan en la Cámara los objetos que se van a revelar, ya con sus huellas; en el calentador que tiene la Cámara, se colocan dos pequeños recipientes; uno es con agua (10 a 15 gotas) y el otro es de 10 a 15 gotas de Cianoacrilato; ya cuando tienes todo esto, colocas la bolsa, la bajas y la aseguras de manera que no se vaya a salir ningún vapor, para que el revelado sea rápido”, describió la universitaria.
Dichas Cámaras pueden ser llevadas al lugar de los hechos (dentro de las prácticas universitarias) porque en la parte de abajo cuentan con una base para su nivelación, logrando así la estabilidad en la superficie, concluyó Alvarez Monjaraz.
Además, en esta iniciativa que forma parte del Fondo de Proyectos Especiales de Rectoría y ForensiUAQ, también participan los estudiantes: Arely Vanessa Aranda Sánchez, María Guadalupe Balderas Méndez, ambas estudiantes de la Licenciatura en Criminología, y Héctor Ricardo Rodríguez Andrade, estudiante de la Ingeniería en Automatización.