El área de rehabilitación, dentro de la Clínica de Atención Integral COVID – UAQ fue inaugurado por la rectora de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), Teresa García Gasca.
En este espacio se realizará la implementación de planes personalizados de rehabilitación para la recuperación de las secuelas físicas, nutricionales, y psicológicas, en pacientes post infectados por el Virus SARS-CoV2, y que hayan cursado la enfermedad de manera leve o grave.
En este sentido, la Rectora dijo sentirse orgullosa del equipo de trabajo que conforma la Clínica COVID UAQ, la cual forma parte del Sistema Universitario de Salud UAQ y señaló que es una muestra de que la Universidad ante la pandemia, no dejó de trabajar, por el contrario, innova.
“El proyecto creció como espuma, en cuanto hubo un ancla de donde tomarse salieron las propuestas, la voluntad, y con el talento e inteligencia de nuestra comunidad hemos logrado tener una propuesta única que va a la vanguardia, y que ahora la UAQ tenga una clínica con esta capacidad es motivo de orgullo porque nos permite ver para que esta hecha la Universidad”, dijo.
La doctora, Eva Perusquía Frías, coordinadora General de Rehabilitación, señaló que está área surgió del trabajo realizado con los pacientes con COVID-19, ya que muchos de ellos presentan secuelas físicas, y emocionales por el confinamiento y el temor a perder la vida; así como trastornos nutricionales por la falta de apetito ante la pérdida del gusto y olfato.
“Al trabajar con estos pacientes nos dimos cuenta de la necesidad de apoyarlos una vez que se les daba de alta, y por ello surge la idea de crear está área de rehabilitación, para que el paciente recupere la estabilidad que tenía previa a la enfermedad. El programa es totalmente pionero, en el país a pesar de que muchos hospitales están trabajando con pacientes con COVID-19, en ninguno existe algún programa de rehabilitación”, comentó Perusquía.
De igual forma, Juan Ernesto Muñoz Arellano, coordinador de la parte médica de rehabilitación, explicó que a los posibles candidatos (pacientes) a este programa, se les hará una encuesta telefónica con preguntas relacionadas a su historial de salud, en caso de ser seleccionados, se les brindará una ficha, se les tomará laboratorios por parte de la Universidad con el objetivo de conocer su estado de salud actual y con ello, determinar cómo se va a trabajar, ya sea reforzando el sistema pulmonar, cardiovascular, respiratorio, u otro.
“Teniendo estas pruebas, hacemos una valoración física, nutricional, de fisioterapia y un tamizaje psicológico para detectar alguna enfermedad que haya quedado o un trastorno psicológico, y que se pueda manejar de manera temprana”, destacó.
