Según estadísticas de la Organización de las Naciones Unidas (UNESCO), en 135 países del mundo decidieron enfrentar la cuarta ola de la pandemia sanitaria con las instituciones educativas abiertas, pero con debidas medidas salubres, mientras que en 25 se encuentran totalmente cerradas las aulas.
Indicaron que los países afectados por la variante ómicron de la Covid19, que es altamente contagiosa, no ha logrado cerrar los centros educativos en la gran mayoría de los países, sin embargo, algunos otros han optado por la enseñanza híbrida, es decir, combinarla entre presencial y virtual.
Sin embargo, alrededor del 70 por ciento de las naciones, no ha suspendido la escolarización presencial, pero han implementado sistemas de vigilancia como el semáforo epidemiológico que activan diferentes medidas en función de los niveles de infección.
Así como el uso obligatorio de mascarillas, lavado de manos, ventilación, sana distancia, entre otros.
Sólo una docena de países ha optado por cerrar las escuelas y pasar a una enseñanza totalmente a distancia en lugar de presencial desde el estallido de la variante ómicron. Esto contrasta fuertemente con el mismo periodo del año pasado, cuando se cerraron las escuelas y el aprendizaje fue totalmente a distancia en 40 países.
La UNESCO aprovechó para lanzar un llamado a todas las naciones, para que redoblen esfuerzos para vacunar a los profesores, ya que, afirma, este sector de la población no fue asignado a ningún grupo prioritario en aproximadamente uno de cada 3 países.
El estudio realizado por la UNESCO y la Asociación Internacional para la Evaluación del Rendimiento Escolar en 11 países, informa de que más del 50 por ciento de los profesores declararon que los alumnos no habían progresado a los niveles esperados. Asimismo, indica que la mayoría de los profesores coincidieron en que era difícil proporcionar el apoyo necesario a los alumnos vulnerables.
