La rectora de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), Teresa García Gasca, inauguró la Jornada “Juntas hasta la vida”, evento organizado por colectivos feministas de la entidad en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer que se celebra este 25 de noviembre.
En el evento, García Gasca refirió que este tema debe comenzar en casa, ya que, dijo, si no se educa a los hijos e hijas en un ambiente de equidad e igualdad, sin estereotipos, y si no se empodera a las mujeres y se sensibiliza a los hombres, es un problema que no se resolverá.
Agregó que desde la Universidad se trabaja por llevar a cabo estrategias que permitan la equidad, que beneficien a todos por igual, que den la misma oportunidad a hombres y mujeres sin distinción de orientación sexual, de género, de filosofía de vida, o de estrato socioeconómico, pero muy particularmente, preocupa el tema de la violencia de género, situación que, resaltó, también se da en las instituciones educativas debido a que la violencia se ha normalizado.
“Eso quiere decir que no la detectamos y permitimos que continúe, únicamente cuando nos hacemos sensibles a los diferentes tipos de violencia, económica, psicológica o sexual, es cuando la detectamos y es entonces cuando la podemos evitarla, porque reconociendo el problema es el primer paso para poder resolverlo”, señaló la Dra. García Gasca.
De igual forma, apuntó la importancia de las mujeres en los aspectos académicos y científicos, áreas en donde se ha ido mostrando que los prejuicios de género contra la mujer son absurdos y arcaicos.
Comentó que, de acuerdo con la UNESCO, el 45.2 por ciento de las personas que realizan investigación en Ciencia y Tecnología en América Latina y el Caribe son mujeres, porcentaje que supera a la media de otras regiones del mundo, como Oceanía, África, Europa y Asia, lo que significa que América Latina hay un porcentaje mayor de mujeres que realiza investigación científica y tecnológica.
“Si hay más mujeres en la ciencia ¿por qué no hay más mujeres en los puestos de tomas de decisiones?, además de que actualmente el 50 por ciento de los estudiantes de posgrado del país son mujeres, el 47 por ciento de la matrícula de estudiantes son mujeres, de las cuales el 45 por ciento egresan, a pesar de este número tan importante, esto no se ve reflejado en la investigación, ya que en el caso de la UNAM, el 67 por ciento de los investigadores son hombres y en el Sistema Nacional de Investigadores, las cifras para los niveles 2 y 3 son bajos para mujeres”, destacó la rectora.
También resaltó, que a nivel nacional, cada dos horas y media, en promedio, una mujer es asesinada; nueve mujeres asesinadas cada día; aunado a que en los últimos 25 años ocurrieron más de 35 mil defunciones de mujeres mexicanas por presunción de homicidio; dos de cada tres mujeres han experimentado algún tipo de violencia; 41 por ciento ha sido víctima de violencia sexual en alguna etapa de su vida; seis de cada 10 agresiones contra mujeres mexicanas en la vía pública son de índole sexual; 15 de cada 100 mujeres entre 20 y 24 años fueron madres siendo menores de edad; 15 por ciento de las mujeres de 15 años y más que han perdido el trabajo les fue requerido un certificado de no embarazo o las despidieron por embarazarse.
“Estos son algunos datos que tenemos y que desde luego nos tiene que preocupar y sobre todo ocupar. Estoy convencida de que el feminismo en este momento, que ha tomado tanta fuerza, abre el camino para visibilizar el problema y la visibilización es el primer paso que hay. Pero la violencia contra la mujer no es solo cosa de mujeres, hay que involucrar a los hombres en todos los sentidos, a través del conocimiento de la masculinidad, es un trabajo conjunto, que tenemos que llevar a cabo y que en este momento estamos en esa encrucijada ¿Cómo trabajar juntos?, esto es un problema que se tiene que resolver desde la educación, así que el mensaje es ese, eduquemos a nuestros niños, niñas y jóvenes en un ambiente de equidad, igualdad, respeto y armonía, es la única forma en que vamos a lograr responder y resolver este problema tan grave que tenemos hoy en día”, afirmó.
De acuerdo con las organizadoras del evento, la Jornada “es producto de la lucha feminista, de sororidad y del hartazgo ante la desigualdad estructural, histórica, que viven las mujeres por razón del género todos los días y que ha sido normalizada y aceptada y que sin embargo, no estamos dispuestas a tolerar más”.
