La Organización Internacional del Trabajo (OIT) advirtió que, debido a la pandemia del COVID-19, en América Latina y el Caribe, la tasa de desocupación podría subir entre 4 y 5 puntos porcentuales, elevando el número de desempleados en la región al récord histórico de 41 millones de personas.
De acuerdo con la organización, si la crisis se acentúa, la situación laboral podría empeorar amplificando las desigualdades sociales.
De acuerdo con la OIT, la pandemia de la COVID-19 tiene un impacto inédito en los mercados de trabajo de América Latina y el Caribe donde ya se registra un fuerte aumento de la tasa de desocupación y causará un aumento de la desigualdad y la pobreza en la región.
El análisis de la OIT divulgado hoy indica que la tasa de desocupación promedio de la región, que a fines de 2019 era de 8,1 por ciento, podría subir entre 4 y 5 puntos porcentuales según los datos recopilados hasta el momento.
Pero si la crisis continúa profundizándose la situación podría empeorar, destacó el análisis “Panorama Laboral en tiempos de la COVID-19: Impactos en el mercado de trabajo y los ingresos”, de la oficina de la OIT para América Latina y el Caribe.
“Ese aumento sin precedentes en la tasa de desocupación regional implica un récord histórico de 41 millones de desempleados, lo cual va a repercutir sobre la estabilidad económica y social de nuestros países”, explicó el director de la Oficina de la OIT para América Latina y el Caribe, Vinícius Pinheiro.
El análisis destaca que el más reciente pronóstico del Banco Mundial estima una caída en el crecimiento económico de -7,2 por ciento lo cual llevaría la tasa de desocupación hasta 12,3 por ciento, mientras que si se consideran los últimos datos del FMI de una contracción de -9,4 por ciento los niveles de desempleo llegarían hasta 13 puntos porcentuales.
En números absolutos, esas tasas implican un aumento en el número de personas que buscan empleo y no lo consiguen de 26 millones antes de la pandemia a 41 millones en 2020.
Además, se enfrenta el deterioro de la calidad de los puestos de trabajo y de la reducción de los ingresos de los trabajadores y de los hogares.
Por otra parte, el documento dice que en la región aproximadamente un 40% del total del empleo se desarrolla en sectores económicos de alto riesgo frente a la crisis detonada por la pandemia, mientras que un 17% lo hace en sectores de riesgo medio-alto. “Alrededor del 60% de los ocupados en América Latina y el Caribe se encuentran expuestos a significativas pérdidas de empleo, de horas trabajadas y de ingresos laborales”.