*Buscan garantizar servicios de salud gratuitos a quienes carezcan de seguridad social
Con el objeto de garantizar el acceso a los servicios de salud en la población, la diputada Dulce Ventura, presidenta de la Comisión de Salud en la LX Legislatura del Estado, presentó la iniciativa de Ley que reforma y adiciona la Ley de Salud del Estado de Querétaro.
La legisladora mencionó que con esta ley se busca homologar la Ley de Salud del Estado de Querétaro, a la que establece la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y la Ley General de Salud, con la finalidad de que se puedan prestar los servicios de salud, medicamentos y demás insumos asociados para la atención integral y gratuita de personas sin seguridad social.
Destacó que de acuerdo al Informe Anual sobre la Situación de Pobreza y Rezago Social 2021 de Querétaro de la Secretaria Bienestar del Gobierno Federal, 248 mil personas carecen de acceso a los servicios de salud; es decir, que uno de cada 10 queretanos no cuenta con servicios de salud; mientras que un millón 106 mil personas no cuentan con el acceso a la seguridad social, cifra mayor que representa casi 1 de cada 2 personas, lo que es sumamente grave.
“Esta responsabilidad se sigue mostrando con la aprobación del presupuesto de egresos para el presente año, trabajo conjunto entre el ejecutivo, este poder legislativo y demás áreas gubernamentales, donde se logró un incremento del 18% al sector salud y un 26% para grupos vulnerables y de rezago social, pues cada una de las acciones lleva un objetivo principal, que es contribuir en la mejorar la calidad de vida”
Sumado a ello, la entidad tiene una alta prevalencia sobre las enfermedades crónico degenerativas, pues el 38% del total de muertes en el Estado son relacionadas a la Diabetes Mellitus, las enfermedades del Corazón y las cerebrovasculares, así lo refiere el Plan Estatal de Desarrollo de Querétaro, por lo cual es necesario redoblar esfuerzos desde la prevención y posteriormente en su atención de manera oportuna, dado que quien lo padece repercute no solo en la calidad de vida de la persona enferma, sino también de la familia.