Erradicada la fiebre aftosa, en 1954 se realizó la Exposición Ganadera, con la participación de los ganaderos Joaquín Fernández Rubio, Antonio Urquiza Couturier, Manuel M. Urquiza e hijos, los hermanos Fernández Rubio, Dr. Álvaro Larrondo y hermanos, Antonio García Jimeno, Eduardo Ruiz Gutiérrez, Teófilo Gómez Centeno y David Sierra, en el Estadio Municipal, los días 25 y 26 de diciembre.
Alfonso Soto Estrada, propietario del Rancho Vanegas, con el apoyo del gremio ganadero, solicitó a Antonio Urquiza Couturier, al Ing. Jorge Montemayor García, representante de la Secretaría de Agricultura y Ganadería y a Antonio Barrera Vázquez, colaborador de la Junta Local de Caminos, un recinto para efectuar de manera definitiva las siguientes exposiciones ganaderas.
Siendo Gobernador Juan C. Gorráez, Antonio Urquiza Couturier solicitó al Presidente de la República, Adolfo Ruiz Cortines, 17 hectáreas en el Cerro de las Campanas, que fueron concedidas el mismo año. El proyecto de construcción comenzó e 1955 y estuvo encabezado por el Ing. Antonio Mariné, Antonio Urquiza, Ing. Jorge Montemayor y Antonio Barrera. Recibieron el apoyo de los empresarios don Roberto Ruiz Obregón y el Ing. Bernardo Quintana, quien donó el Pabellón Industrial.
Tomando en cuenta el carácter educativo intrínseco de las exposiciones, diseñaron dentro del terreno un área con pequeñas parcelas con cultivos de soya, frijol, cebada y trigo, así como variedades de pastos. Se estimuló la asistencia de grupos escolares y productores rurales, a quienes les ofrecían visitas guiadas con asesoría del personal técnico de la Secretaría de Agricultura.
En 1958 se inauguró el nuevo recinto, y en el discurso inaugural, el secretario del Comité Organizador, José María Hernández dijo: «ha nacido un gigante», profetizando que las exposiciones ganaderas en Querétaro tendrían una trascendencia más allá de nuestras fronteras.