Este próximo viernes, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, visitará Michoacán, sin embargo, se prevé que solo se presente en la capital del Estado y no en aquellos municipios que se encuentran secuestrados por la delincuencia organizada.
Fue el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez, quien anunció la visita del jefe del Ejecutivo federal, quien pretende evaluar las acciones del Plan de Ayuda para la entidad, que supuestamente puso en marcha el pasado 9 de octubre.
Ese día, el político tabasqueño anunció una serie de acciones y apoyos para la entidad, donde destacó el tema de la nómina magisterial, el despliegue de miles de efectivos para la estrategia anticrimen, entre otros.
Sin embargo, este mismo día, el párroco de Aguililla, Michoacán, volvió a lanzar un clamor de ayuda, ante el sometimiento que viven los habitantes por la lucha que mantienen los carteles de las drogas.
Los hampones han destrozado la planta de energía eléctrica y carecen de luz, las carreteras para imposibilitar la entrada de los cuerpos policiacos y con ello, impiden el libre tránsito de los ciudadanos.
Asimismo, las empresas de abarrotes, no envían productos a toda la región de tierra caliente, por temor a que sus operadores sean víctimas de la delincuencia organizada.
Miles de michoacanos, viven sin energía eléctrica, sin poder salir o regresar a sus municipios, sin acceso a internet, con escasos alimentos y en medio de la ola de balaceras y ejecuciones.
El gobernador michoacano, no precisó si el Presidente acudirá con el pleno del gabinete, ni el número de secretarios que le acompañarán. Ante la ola de violencia que aqueja la entidad, pese a las promesas de López Obrador de restablecer la tranquilidad, el coordinador de la bancada priista en el congreso local, Jesús Hernández, aseguró que el presidente de la República, únicamente visita la tierra purépecha con fines recreativos, ya que, sus promesas, nunca aterrizan y solamente quedan en el aire.
