El IMSS compró en 2018 diversos equipos para el Hospital General Regional No. 2, en La Pradera El Marqués mediante adjudicación directa.
Sin embargo, el instituto ya había adquirido ese mismo año, equipos iguales pero mediante un procedimiento de licitación.
Así lo consignó la Auditoría Superior de la Federación en la auditoría Auditoría De Cumplimiento a Inversiones Físicas: 2018-1-19GYR-22-0274-2019 274-DS, sobre la “Construcción de un Nuevo Hospital General Regional (HGR), de 260 Camas en el Municipio de El Marqués, en el Estado de Querétaro”:
“El IMSS llevó a cabo la asignación de contratos mediante el procedimiento de adjudicación directa y no por medio de licitaciones públicas, no obstante que en el mismo año y con cargo al mismo proyecto se formalizaron contratos por este último procedimiento para adquirir equipos iguales”.
A raíz de esta observación, la ASF inició la “Promoción de Responsabilidad Administrativa Sancionatoria” No. 2018-9-19GYR-22-0274-08-004, en virtud de en los contratos DBIQRO-036-2018, DBIQRO-038-2018, DBIQRO- 041-2018, DBIQRO-042-2018, DBIQRO-043-2018, DBIQRO-044-2018, DBIQRO-049-2018, DBIQRO-054-2018, DBIQRO-056-2018 y DBIQRO-057-2018 -por un monto conjunto de 47 millones 316 mil 88 pesos-, fueron entregados por adjudicación directa “en vez de hacerlo por medio de licitaciones públicas”.
Lo anterior, “no obstante que, en el mismo año y con cargo al mismo proyecto núm. 1450GYR0058 «Construcción de un nuevo Hospital General Regional (HGR), de 260 camas en el municipio de El Marqués, Querétaro», se formalizaron contratos por este último procedimiento para adquirir equipos iguales”.
Para solventar estas observaciones, el IMSS solo argumentó que las personas involucradas ya no laboraban en el instituto:
“La observación persiste, en virtud de que la respuesta (el IMSS) no aclara la observación… toda vez que en sus argumentaciones únicamente se señala que la mayoría del personal que intervino en dichas adjudicaciones no se encuentra laborando actualmente en el instituto.
Además de haber realizado compras duplicadas para el hospital, algunos equipos terminaron en clínicas distintas al HGR2 de La Pradera.
“De manera injustificada, la entonces encargada de la Jefatura de Prestaciones Médicas de la Delegación Estatal Querétaro, mediante el oficio con número de ref. 239001200100/2770/2018 del 17 de octubre de 2018, le solicitó al Director del Hospital General Regional No. 2 El Marqués, Querétaro, con base en las necesidades médicas y después de analizar el equipamiento del HGR2, la reubicación de diversos equipos adquiridos para ese hospital en las siguientes unidades hospitalarias del IMSS: Hospital General Regional núm. 1 (HGR1), Unidad Médica de Atención Ambulatoria (UMAA) y varias Unidades de Medicina Familiar (UMF)”, según consta en el documento de la ASF.
Por esta reasignación de equipos, la ASF solicita al órgano de control interno del IMSS el inicio de un procedimiento de sanciones administrativas al no acreditarse “la justificación para la reubicación de equipos adquiridos con cargo al proyecto con clave núm. 1450GYR0058, específicamente para el Hospital General Regional No. 2 (HGR2) El Marqués Querétaro, en otras unidades hospitalarias del IMSS, aunado a que no hay evidencia documental en la Delegación Estatal Querétaro que justifique el requerimiento de esos equipos”.
Proyecto comenzó con el pie izquierdo
La construcción del HGR No, 2 tuvo innumerables retrasos, principalmente porque “el trámite de autorización de la Manifestación de Impacto Ambiental no se obtuvo previo al inicio de los trabajos conforme al programa autorizado”.
Lo anterior, “obligó a diferir la fecha de inicio de la obra y autorizar suspensiones temporales que derivó en un atraso de 262 días naturales”, señaló la ASF.
El IMSS intentó argumentar que los costos adicionales por los retrasos en la obra fueron culpa de los contratistas, sin embargo “la justificación para autorizar los convenios de diferimiento de las fechas de terminación de los trabajos núms. 1-09230002-4-43612C2-18 y 1-09230002-4- 43612C3-18, fue precisamente que se excedió el plazo para el pago de las mismas”, el “contratiempo” del impacto ambiental.
El retraso tuvo un impacto de $8,914,000 pesos además de que el «diferimiento en la entrada en operación del hospital ocasionó un perjuicio para la población beneficiada calculada en 313,279 derechohabientes prevista para ser atendida originalmente en el año 2017», detalla la ASF.
Por ello, la ASF ordenó al Órgano Interno de Control en el Instituto Mexicano del Seguro Social o su equivalente investigar “y, en su caso, inicie el procedimiento administrativo correspondiente por las irregularidades de los servidores públicos que, en su gestión, en la realización del proyecto núm. 1450GYR0058 ‘Construcción de un nuevo Hospital General Regional (HGR), de 260 camas en el municipio de El Marqués, Querétaro’, ejecutado mediante el contrato de obra pública a precio alzado núm. 1- 09230002-4-43612, no obtuvieron de las autoridades competentes, antes de la realización de los trabajos”.