Desde el 24 de septiembre, las casas de miles de pobladores de Tixtla, en Guerrero, permanecen inundadas sin que las autoridades atiendan sus llamados de auxilio.
El paso del huracán John provocó el desbordamiento de la laguna “Espejo de los Dioses”.
Desde entonces los hogares de 10 mil personas permanecen bajo el agua contaminada con basura, animales muertos y eses fecales.
“Estamos aquí desde el 24, desde que empezaron las lluvias, desde el 24 de septiembre. Lamentablemente la laguna que tenemos acá pue nos sacó, nos orilló a albergues, que estamos realmente ubicados en las calles.
“Nosotros contamos un aproximadamente de 10 mil familias (personas) damificadas, prácticamente medio pueblo”, expresó Camilo Dircio Juárez, representante vecinal del Barrio El Santuario.
Miles de personas permanecen refugiadas en casas de familias, en viviendas prestadas o en albergues instalados en plena vía pública.
Desde hace 13 días, cuando inició la inundación, el Gobierno estatal de Evelyn Salgado solo ha enviado a la población una bomba, la cual es insuficiente para extraer el agua de la ciudad.
“Nosotros pedimos apoyo a lo que es la Gobernador Evelyn Salgado, en el cual nos mandó una bomba de 12 pulgadas, al principio la echaron a andar dos horas de prueba y después la pararon, después la gente de Los Depósitos decían ‘profe, la bombas están paradas, ¿qué está pasando, nosotros también queremos regresar a nuestros hogares’”, comentó Camilo.
Ante la desatención de las autoridades, campesinos de Tixtla decidieron organizarse y utilizar sus propias bombas para extraer el agua, sin embargo, hasta ahora sus esfuerzos no han sido suficientes.
“Ellos se juntaron, 13 bombas de motor, ellos están haciendo su trabajo en el lugar denominado lo que es La Cueva de Amatitlán, la propia gente está sacando el agua de aquí”, dijo.
Tras 13 días de inundación, los pobladores temen el inicio de brotes infecciosos por el agua contaminada.
“Aquí en Tixtla hay gente de escasos recursos que se dedica a criar cerditos, a criar gallinas, a tener animalitos, y nos comentan, al principio, cuando subió la laguna, que una persona tenía 28 marranitos, pero ella ya no les dio prioridad porque estuvo sacando sus cosas, ya no le dio tiempo, y dice ‘profe, todos mis animalitos se quedaron allá, eran 28 cerditos.
“Además aquí no contamos con un drenaje, todas son fosas sépticas, y nosotros le hacemos la invitación a nuestros paisanos que no se metan porque pueden ocasionar un foco de infección grandísimo, y lamentablemente aquí tenemos el problema del dengue, hay muchos casos en Tixtla con dengue y, para acabar, lamentablemente no tenemos apoyo del Gobierno estatal, ni federal”, expresó el profesor Camilo.
A lo largo de las calles inundadas se pueden ver animales muertos, como sapos, y lirios que obstruyen las pocas coladeras de captación de agua pluvial.
Sumado a eso, al menos 500 hectáreas de cultivos resultaron afectadas por el desbordamiento de la laguna, 300 de ella con la pérdida total de la cosecha.
“Bajo el agua son aproximadamente 300 hectáreas que los campesinos perdieron todos sus cultivos, ellos estaban esperanzados ahorita a que todo lo que cultivaban era directamente para el Día de Muertos, así que perdieron sus cultivos de terciopelo, el elote, la calenda de Cempasúchil, la flor del perrito, cultivos como hortalizas, verduras, todo tipo, se perdieron”, dijo.
El llamado que lanzaron los pobladores es a la gobernador Evelyn Salgado.
“Gobernadora, nosotros necesitamos apoyo de manera directa, que lo brinde directamente, no queremos que haya terceras personas, queremos que venga directamente a los campamentos y que nos traiga comidas, que nos traiga alimento, que nos traiga cobijas y sobre todo que vea a los campesinos.
“Están utilizando sus motores, porque no sabemos, cuando baje la laguna, los campesinos van a tronar sus motores, porque es muchísimas agua que estamos mandando para las cavernas y sus motores, en cualquier momento se van a romper y si los campesinos quedaron sin dinero va a ser lo doble, una gran tristeza para ellos”, expresó.
