Por una u otra razón, hay muchas personas que no pueden continuar con sus carreras universitarias y las dejan truncas. En diversos casos, eso suele desmotivar a la mayoría por aquello de que el tiempo se va o de si habrá algún momento en la vida para retomar los estudios. Y aunque a veces las cosas luzcan complicadas, hay historias como la de este abuelito llamado René Neira que nos pone el ejemplo de que nunca es tarde para alcanzar este tipo de objetivos.
Este señor, quien recientemente cumplió 88 años, se acaba de graduar de la Universidad de Texas en la carrera de Economía. Y si esto ya resulta conmovedor en todos los sentidos, la cosa se pone más emotiva cuando uno se entera que recibió su título en compañía de su nieta Melanie, quien también terminó sus estudios en la misma escuela.
La historia del abuelito René
Como dijimos, hay ciertas etapas u ocasiones en la vida que le complican a uno poder estudiar. En el caso del señor René Neira, él tuvo que frenar sus estudios debido a que formó una familia y empezó a trabajar. De acuerdo con lo que dice su nieta Melanie Salazar a Good Morning America (GMA), su abuelito intentó retomar sus clases de licenciatura de manera intermitente mientras trabajaba, aunque no siempre podía.
“Desde la década de 1950, ha estado trabajando para obtener su licenciatura y ha sido una de sus metas y sueños en la vida. Pero en los años 50 se enamoró, se casó y formó una familia, por lo que no pudo continuar la escuela de inmediato“, cuenta Melanie. Durante los 80, cuando sus hijos ya eran adultos, el hombre decidió continuar con sus estudios, aunque de nuevo no al ritmo debido.
René, quien trabajó buena parte de su vida en un banco, además, es reconocido en su familia por ser un activista de San Antonio y de ahí, habría nacido su interés por completar su educación universitaria. “Era un apasionado del desarrollo urbano y económico del lado sur de San Antonio. En la década de 1960, hizo mucha incidencia a través del compromiso cívico. Participó en mítines y marchas y se involucró con el gobierno local. A partir de ese momento, una de las metas de su vida fue obtener una licenciatura en Economía“, dijo Melanie a Today.
Retomando los estudios en el nuevo milenio
Los años pasaron y en 2009 el señor René tuvo que enfrentar un desafortunado suceso: el fallecimiento de su esposa. Por supuesto que un momento así no es fácil de superar, pero el abuelito no se dio por vencido y como pudo, retomó los estudios para alcanzar ese objetivo que se había trazado desde hace décadas.
Para el 2016, su camino académico se cruzó con el de su nieta Melanie cuando ambos asistieron a un colegio comunitario en Palo Alto College. En ese momento, el señor tenía 82 años y la joven apenas acababa de salir de la escuela secundaria, pero ya compartían un logro en común. Al siguiente año, en 2017, ambos ingresaron a la Universidad de Texas en San Antonio; él en la carrera de Economía y ella en Comunicaciones.
Previo a la pandemia, el señor Rene Neira sufrió un derrame cerebral leve y tuvo que pedir un permiso especial para detener sus estudios nuevamente. Además de ello, la modalidad de las clases en línea no hacía las cosas tan fáciles para una persona de su edad. En este punto, cabe destacar que el hombre tiene una enfermedad terminal y se encuentra en cuidados paliativos.
Cursar nuevamente la universidad parecía algo difícil y su familia no sabía si para la graduación, las cosas mejorarían. Así que Melanie y sus allegados decidieron hablar con las autoridades de la Universidad para que en este mes de diciembre del 2021, se le otorgara a René un título especial de reconocimiento en Economía…. y accedieron. En los recientes días, se han hecho virales las fotos de Melanie y su abuelito en la ceremonia de entrega de diplomas, donde los podemos ver con sus togas y birretes en un logró de fin de año que quedará para el recuerdo familiar.
“Definitivamente me ha inspirado mi abuelo. A través de la pérdida de audición, no tener un automóvil, tomar el transporte público, defenderse a sí mismo en el campus, realmente admiré sus ganas, la fuerza o la perseverancia, para seguir adelante sin importar nada“, detalló Salazar a Good Morning America. Con 88 años y varias décadas de perseguir su sueño, el señor René por fin se graduó y nos demuestra que el tiempo no es excusa. Tremenda historia.
Con información de Sopitas