Esta violencia, nunca antes vista en nuestro país, viene catapultada también por la alternancia en el poder, pues lo queramos aceptar o no, se debe al rompimiento de vínculos y esquemas de colaboración entre autoridades y criminales.
Y si a eso le agregamos que, con ese cambio, viene una total falta de coordinación entre las fuerzas de seguridad, da como resultado que, al día de hoy, nos encontremos con un inicio de sexenio que, en materia de violencia, no se había dado en la historia de nuestro país.
Algo de esto podemos dilucidar en las tristemente famosas “Narcomantas” que desde que inició esta nueva administración, se han dejado ver por diferentes puntos del país, algunas amenazando al presidente López y otras, supuestamente firmadas por el líder del Cártel de Sinaloa, “El Mayo Zambada”, todas con el siguiente mensaje:
“Comienza la limpieza en el país venimos con todo el apoyo del gobierno federal comienza la vieja escuela bienvenidos al diálogo todos los cárteles o se alinean o los vamos a desapareser a todos los perros fantoches que se creen narcos San Bartolo Los Arcos Los Cuartos El Molinito Valle Dorado Río Ondo La Juárez San Juan y el CCH”. Así sin comas, en mayúsculas y con faltas de ortografía.
Ésta última fue localizada en un puente peatonal en el municipio de Naucalpan, Estado de México. procedían de un mismo molde: la tipografía era semejante, y todas fueron escritas con letras rojas y negras sobre fondo blanco.
La respuesta por parte de los cárteles rivales, no se hizo esperar:
“Sr. Mayo Zambada, pa’ empezar aquí no es su plaza, las hermanas Akiles y Rana [jefes regionales del Cártel de Sinaloa] no pueden con la plaza. Está grande el paquete pa’ esos y demostrado está en las calles quien trae el poder y nosotros el Cartel Tijuana Nueva Generación estamos abiertos al dialogo pero a nosotros nadie nos alinea, con respeto se hacen las cosas porque huebos aquí sobran pa’ pelear con el que sea miedo no hay”.
Estas “narcomantas” surgen en los territorios del Cártel Jalisco Nueva Generación, quienes a parte del narco, se dedican al “huachicoleo” los reyes de la droga y del huachicol.
En este sentido es un hecho, salvo para el que no quiera ver que se está dando, desde la obscuridad, un intercambio de mensajes, es un presagio de lo que viene.
El escenario está claro, la realidad es que hemos tenido más muertos en la amnistía y en el “abrazos, no balazos”, del nuevo régimen, que en la guerra de Calderón.
En el primer cuatrimestre de gobierno del nuevo régimen, suman 11,372 víctimas de homicidio doloso y la lista la encabezan estados como Veracruz, Guanajuato, Estado de México, Baja California, Chihuahua, la Ciudad de México, San Luis Potosí y Morelos, entidades que reportaron alzas de homicidio doloso en marzo.
De acuerdo con datos de la actual administración, en este primer trimestre, los estados que más incrementaron sus homicidios son Nuevo León, 104 por ciento; CDMX, 48 por ciento, Tabasco, 47 por ciento, Quintana Roo, 46 por ciento y Jalisco, con 38 por ciento.
Por el contrario, la incidencia de homicidios en estos estados, se dio a la baja: Nayarit, -67 por ciento, Baja California Sur, -64 por ciento, Durango, -33 por ciento y aunque no se pueda creer, Guerrero, -31por ciento y Tamaulipas, -27por ciento.
Por estos casos, se han abierto 7,242 carpetas de investigación, lo que representa un incremento del 9 por ciento con respecto al mismo periodo en 2018, que registró 6,598 expedientes iniciados por este delito.
De esos homicidios, destaca una tasa de 3.2 menores asesinados con violencia diariamente en nuestro país. Cada número es una vida, un padre, una madre, un hijo.
Aunque el presidente en su gira por el estado de Veracruz dijo que en un plazo de 6 meses la violencia iba a disminuir, las tendencias indican lo contrario.
Luego de los hechos registrados en Minatitlán, esto es lo que declara el presidente: «Todavía tenemos que enfrentar ese cochinero que nos dejaron, pero vamos a limpiar al país, ya no habrá corrupción, me canso ganso».
El argumento de la actual administración es echar la culpa a los anteriores presidentes, cuando el problema es más de fondo.
Muestras de la miseria humana es el asesinato de los niños, el aumento a la violencia, tanto como decir que es obra de los poderosos y un ataque al actual presidente.
La tragedia de los homicidios nos duele a todos, como nos ha dolido con los demás gobiernos, no importan los colores.
Hacer política con el dolor es ruin, pero más ruin es ignorarlo.
Tiempo al tiempo.