Había una vez un señor que manejaba un auto compacto para otro señor, era su fiel ayudante y chofer y 12 años después es un empresario próspero y millonario, sin que se le conociera otra habilidad que la de manejar un vehículo compacto. Fin.
A veces la realidad supera a la fantasía y hoy el nombre de Nicolás Mollinedo Bastar, sale como batazo por el central en los titulares de los diarios por presuntamente haber recibido 2 millones de dólares del narcotráfico para financiar la campaña presidencial de su jefe, Andrés López.
Era el 2006, cuando Andrés Manuel López Obrador (AMLO) fue el candidato de la coalición «Por el Bien de Todos», conformada por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), el Partido del Trabajo (PT), y Convergencia y que al final terminó perdiendo contra Felipe Calderón.
Si recordamos, esas elecciones estuvieron marcadas por la influencia del narcotráfico y la violencia asociada. Durante la campaña, varios candidatos y funcionarios políticos enfrentaron amenazas y ataques por parte de cárteles de drogas, lo que destacó la intersección entre la política y el crimen organizado en ese momento.
En particular, se produjeron varios eventos violentos, incluyendo asesinatos de políticos locales y enfrentamientos entre grupos criminales. Estos sucesos generaron preocupación sobre la capacidad del Estado para garantizar la seguridad y la integridad del proceso electoral.
Algo muy parecido a lo que estamos viviendo ahora y que el buen Nico en su momento, vivió muy de cerca.
Hoy, el también tabasqueño, liderea su propia asociación civil, que un día quiso ser partido, para ser rémora de morena, pero, afortunadamente no lo logró, Movimiento Ambientalista Social (Más por México), de la cual es fundador y comparte la cima con Mauro Soto a quien también señalan en el reportaje de estar implicado en la recepción de recursos.
Fue el chofer, la persona más cercana a López cuando éste último fue jefe de gobierno del distrito federal, con un sueldo en aquel entonces de 63 mil pesos, un sueldo de Subsecretario, nada mal para un humilde chofer de un humilde gobernante que, desde aquellos días defendía a capa y espada su austeridad.
En el 2015 encontró acomodo en la delegación Cuauhtémoc, al mando de Ricardo Monreal, donde sed desempeñó como director de Recolección y Tratamiento de Residuos Sólidos, negociazos.
Ya con López en el poder se convirtió en un empresario muy fructífero además de contar con mucha suerte, pues los terrenos y el parque turístico que existe ahí que es administrado por los hijos de Nico, Nicolás, Samuel e Isaac René y que son propiedad de la familia en Tulum, quedaron milagrosamente cerca de la estación del tren maya de ese destino turístico.
Y también, como si tuvieran una bola de cristal, Nicolás, hijo mayor del ex chofer de López Obrador, se hizo del terreno en octubre de 2018, dos meses después de que el presidente anunciara la construcción del Tren Maya.
Esos terrenos, cuentan con un cenote, regaderas, palapas, área de comida, baños y un espacio comercial para la renta de snorquels, a quinientos pesos por persona.
“Los dueños de la empresa Preservación Ecológica Sac Actún que administra el parque son Lydia Esther Portilla Mánica, ex esposa de “Nico”, y su hermano, Jorge Alberto Portilla Mánica, actual secretario general del Ayuntamiento de Tulum”, menciona el reporte.
Y Samuel, el segundo hijo de Mollinedo Bastar, es regidor en el Ayuntamiento de Benito Juárez (Cancún), donde es presidente de la Comisión de Desarrollo Urbano y Movilidad en este municipio de Quintana Roo.
Y que decir de los puestos que ocupan los familiares de Nico, gracias a que fue un bien chofer y lo llevó y lo trajo con bien, además de ser su brazo derecho y líder de la logística de López en las campañas de 2006 y 2012.
También no sé si con el tiempo nos volvemos más refinaditos, pero el buen Nico se describe como amante de la charrería, los caballos, los autos clásicos y deportivos, y un poquito ya menos del Tsuru, especial en color blanco. Amante de beisbol, pues el mismo dice “siempre siguiendo los últimos resultados y estadísticas de la LMB (Liga Mexicana de Béisbol”.
O que tal su primo, Rafael Fernando Marín Mollinedo, hoy representante permanente de México ante la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Y la lista sigue, la lealtad se paga bien, solo no hay que olvidar de donde vienen los personajes que son señalados por actos de corrupción.
Ese es, a grandes rasgos, el buen Nico.
Las acusaciones son serias y si bien provienen de un testigo protegido, pues a veces son confiables o a veces no, depende de que lado de la mesa estés.
Los narcos y la política son un mal necesario para ambos desde hace muchos años y hoy día no es la excepción.
Lo cierto es que el departamento de justicia confirmó la existencia de la investigación, pero no llegaron a nada.
Son tiempos de elecciones, es conocido que la DEA, la CIA y el FBI se mueven para poner y tirar gobiernos, todos quieren su parte del pastel, todos quieren su influencia, todos tienen intereses.
Ya van varios golpes a López en la semana, está enojado.
¿Pero el que se lleva se aguanta no?
Tiempo al tiempo.
@hecguerrero