Todo lo tolerado está permitido, recordando aquellas conversaciones con empresarios gasolineros, ahora el concepto de huachicol, se ha tornado a la venta y robo de combustible, sin embargo en aquellos años, el huachicol era un delito esporádico y subrepticio, que representaba básicamente una molestia y algunas pérdidas a los gasolineros donde se cometía este delito que consistía en, básicamente, vender combustible adulterado.
El negocio era para los conductores de pipas, que salían de las TAR con la pipa llena y en el camino le “ordeñaban” el 10 % y lo sustituían con agua.
Durante la administración peñista y los primeros días del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, el huachicoleo se ha convertido en un tema de seguridad nacional.
Según el diccionario de Mexicanismos, la palabra huachicol, proviene del vocablo maya waach, y describe a los foráneos o los forasteros. Al castellanizarse, mantuvo su original sentido como Huache o Guache, usada de forma despectiva, como sinónimo de falso o de mala calidad.
Aquí es donde surge un tema, recientemente, el presidente López anunció la compra de 500 pipas para garantizar el abasto, sin embargo, hay que mencionar algunos aspectos.
Primero, la adquisición de 500 pipas por parte del gobierno federal, para transportar 200 mil litros diarios de combustibles, equivalentes al consumo diario en la CDMX.
¿Cuándo entrarán en operación? La operación de esos vehículos requiere personal calificado con licencia tipo «E», constancia de aptitud psicofísica vigente, póliza de daños a la ecología y otros requisitos estrictos. De otra forma serían prácticamente bombas con ruedas.
El costo al erario de estos vehículos es de unos mil 250 MDP. Cada pipa cargaría medio millón de pesos adicional al costo de la unidad. Esto pone sobre ruedas 250 mil mdp en combustibles sobre los caminos de México. Un operador de pipa de combustible, consultado por un servidor, indicó que esto facilita el robo del hidrocarburo, no solo la carga, sino de la pipa completa. El «huachicoleo» a la antigua ya no es negocio. «Ahora estos cabrones se roban las pipas completas».
¿Habrá más seguridad en las carreteras para el paso seguro de esta nueva flota vehicular?
Aquí los únicos contentos serán los de la empresa “Excellence Freights», subsidiaria del Grupo Idesa, cuyo timón lleva José Luis Uriegas, compañía fundada hace 60 años por Pascual Gutiérrez Roldán, el exsuegro de Javier Jiménez Espriú, que se dedica a la venta de éstas unidades. El secretario de Comunicaciones no se ha podido desmarcar del tema.
Por otra parte durante la contingencia de “escasez” de combustible la paraestatal incrementó sus ventas de manera sustancial en la Ciudad de México y pasó de vender 4.3 millones de litros a 13.4 millones. Sin duda el factor determinante para este aumento de las ganancias podría deberse al combate contra el huachicoleo.
El presidente Andrés López, aseguró que las gasolineras que se surtían del huachicol ahora solo pueden comprar a la paraestatal, pero si la compra venta ilegal de combustibles es un delito federal ¿irán los gasolineros huachicoleros a la cárcel o serán perdonados?
El mismo aumento de ventas se presentó en Jalisco que pasó de 8.2 millones a 9.2, y en el Edomex de 8.9 a 9.2; sin embargo en las demás entidades el consumo tuvo un decremento de 2.4 millones de litros.
Sumando todo, a nivel nacional, se pasó de vender 119.1 millones de litros vendidos a 127 millones de litros.
Así el gobierno parece componer una idea que resultó un fracaso, en la que el único detenido por el operativo al robo de combustibles fue México.
Esta historia está lejos de terminar y parece que la compra de esas pipas es tratar de detener o cortar un chorro de agua con tijeras. Huachicol & Co. no va a renunciar tan fácil a su panacea y que no nos extrañe que los balazos aumenten sobre los abrazos, pues hoy por hoy, el 90 por ciento de los homicidios en el país son producto del narcotráfico y el huachicol.
¿Estamos en la antesala de una escalada de la violencia en el país, como en el tiempo de Calderón?
Corazoncitos, seguiremos informando.
Tiempo al tiempo.