Desde la otra frontera

¿Ha comenzado la invasión?

Últimamente, ha sonado mucho la palabra “invasión”, desde operaciones militares como Rusia contra Ucrania o Israel sobre Gaza; la invasión temporal del ejército gringo en una playa mexicana para rescatar materiales de desecho de cohetes espaciales o el tumor de la invasión americana contra Venezuela… hasta la teoría conspirativa de que el asteroide 3I/Atlas es en verdad una nave espacial que vendría a la Tierra, ¡claro, a invadir!

Pero parece que la verdadera invasión está ocurriendo en el terreno económico, y como primeros frutos de las guerras comerciales. Hace solo unos días, se dio la noticia de que por primera vez en mucho tiempo México había desplazado a Canadá como principal destino de las exportaciones de Estados Unidos.

Quizá de entrada suena como una buena noticia, el país azteca doblando en algo al país del Maple. Pero ¿no es precisamente ése el plan de Trump? Cambiar la balanza comercial con otros países, para venderles más y comprarles menos. En el escenario político internacional, se ha alabado a Claudia Sheinbaum por “lograr concesiones” de la Casa Blanca en materia arancelaria, librando nuevos aranceles, mientras que Mark Carney ha batallado con fuerzas internas que han desatado la furia de Trump, haciendo que suban algunos aranceles contra Canadá.

Sin embargo, desde el principio de esta guerra arancelaria, la lucha fue emprendida no solo por el gobierno, sino por los ciudadanos y las empresas; todos lanzaron una campaña de “codos arriba” y vamos a dejar de comprar productos gringos, sacaron de las vinaterías (controladas por el gobierno) casi todos los licores de origen americano y miles de canadienses cambiaron sus planes de visitar Estados Unidos. Los estados fronterizos gringos han lanzado fuertes campañas invitando a sus “amigos” canadienses a sus ciudades.

Bueno, a casi 6 meses del inicio de esta guerra comercial, los primeros frutos están saliendo a la luz. 

Durante 2025, entre los principales productos americanos que han disminuido sus exportaciones hacia Canadá destacan los metales, con una baja de 17%; pues recordemos que el acero y el aluminio fueron gravados con hasta un 50%, y aunque afecta importaciones hacia USA, este producto es de aquellos que participan en varias cadenas productivas como la automotriz y cruzan la frontera de ida y vuelta varias veces. 

Otros sectores canadienses que han bajado sus importaciones de Estados Unidos son maquinaria industrial, equipos eléctricos y electrónicos, entre 6 % y10%. 

Esto demuestra no solo la voluntad de las empresas canadienses por diversificar sus mercados, fortalecer el comercio interior (están quitando barreras entre provincias), también obedece al impulso de grandes proyectos de infraestructura del gobierno. Carney -que por poco pierde el voto de confianza y su puesto- no ha parado de salir a vender el país (en el mejor sentido), desde Europa hasta China, India y ahora en los Emiratos Árabes.

Un caso muy especial es la compra de aviones caza militares F35, que originalmente se comprarían a una empresa gringa, ahora podría irse a un proyecto con Saab una agencia sueca que fabrica aviones de guerra (Gripen). Esta operación representa una operación de miles de millones de dólares y reemplazaría, al menos en parte, las compras a USA.

Todo esto no quiere decir que los aranceles de Trump no estén dañando la economía canadiense, por supuesto que sí, pero hay consciencia y voluntad de redirigir los flujos comerciales a otros mercados, para no ceder a las presiones americanas.

¿Esto significa que entonces México sí está cediendo a esas presiones? Recordemos que el plan de Donald Trump es “revivir la gran industria americana” y vender más de lo que se compra a otras naciones.

Y las cifras indican que así es, México está ahora comprando más productos gringos. La prensa muestra este fenómeno como causa de una fortalecida clase media mexicana con mayor poder de compra, ¿pero lo es?

¿Qué productos gringos han aumentado sus ventas hacia México?

Computadoras y sus partes aumentaron sus ventas en casi 100%, que definitivamente mostraría mayor poder adquisitivo, pero también se debe a la expansión y modernización de empresas en preparación a sostener e incrementar ventas al mercado americano, y a una mayor integración tecnológica. Lo cual incluso se refleja en el aumento en la venta de aeronaves y sus partes.

Sin embargo, dos productos que han aumentado sus ventas en México reflejan el fracaso de la capacidad de abasto de PEMEX: la importación de gas natural y productos petroleros refinados, como la gasolina. Las importaciones de gas natural crecieron casi 60%; México de por sí ya importaba poco mas de la mitad de la gasolina que consume.

Otro caso intrigante es el aumento de las importaciones de autopartes, sobre todo para entidades como Querétaro cuya economía depende bastante en ese sector. ¿Será que hay o habrá más armadoras gringas en territorio mexicano? ¿Son armadoras de otras naciones que para cumplir con las exigencias de contenido regional amplían sus operaciones en México, aprovechando la cercanía y el bajo costo de la mano de obra?

El INEGI reporta una contracción del PIB del sector industrial en casi -3%. Canadá ha venido tratando de librar una recesión, mientras que algunos sectores de Estados Unidos también muestran crecimiento negativo.

No perdamos de vista que el gran objetivo para Sheinbaum y Carney es salvar el tratado de libre comercio (T-MEC) de Norteamérica, pues a través de él se mueve la mayoría de los intercambios comerciales del bloque. Y que, en las guerras comerciales, podrían ganar los fabricantes, pero los consumidores son quienes ultimadamente pagan el precio.

En el sector automotriz, el eje central del T-MEC, la integración de partes es global y de ahí la condición de reglas de origen y un mínimo componente regional. Se ha visto recientemente que la venta de vehículos hechos en México hacia Canadá ha subido. La guerra arancelaria está forzando a una recomposición del sector industrial, el más globalizado del mundo, y está obligando a una mayor flexibilidad y adaptabilidad para sobrevivir.

Mientras que, en las guerras militares, la invasión es territorial con ejércitos y vehículos; en las guerras comerciales se invade la economía, los estantes, los sitios de internet, los closets de la gente.

Esperamos que estas invasiones sigan siendo en el terreno comercial y no pasen al ámbito militar.

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