El proceso electoral de Querétaro iniciará formalmente entre el 16 y el 31 de octubre de este año; unos ocho meses antes de la jornada electoral programada para el 6 de junio del año próximo.
El arranque del proceso electoral del estado se dará con la contingencia de COVID-19 todavía entre nosotros y con la incertidumbre de si, todavía más adelante, tendremos la presencia de brotes y rebrotes en el territorio mexicano.
Ante las fallidas estimaciones de las autoridades sanitarias mexicanas, que lo mismo dicen que el pico de la pandemia se daría el 6 de mayo, y que luego corrigieron que para el 10 del mes pasado y ahora afirman que habrá sitios donde el pico de contagios se esté registrando incluso en el mes de octubre, ya no hay a qué atenernos.
Lo único claro, en medio de la contingencia sanitaria que vive el mundo, es que el virus llegó para quedarse.
De acuerdo con la nueva Ley Electoral del estado aprobada en mayo y publicada el pasado martes, en Querétaro, las campañas para la elección de gobernador iniciarán formalmente el 3 de abril y concluirán el 2 de junio del próximo año.
La nueva ley electoral señala, además, que la elección en la que se elegirá gobernador, 18 alcaldes y se renovará el congreso, se realizará el 6 de junio y será concurrente con la elección federal.
Como decía al inicio de esta colaboración, el proceso electoral dará inicio entre el 16 y el 31 de octubre de 2021; es decir, para esas fechas el virus SARS – Cov – 2 seguirá presente de manera importante en el país.
Difícilmente durante los siguientes meses podremos contar con una vacuna para combatir el virus; hay estimaciones que señalan que ésta podría estar lista para su producción masiva, en el transcurso del primer trimestre del próximo año.
Una vez iniciada su producción, la vacuna tardaría todavía varios meses en ser distribuida a todos los rincones del mundo y, todavía más tiempo para inmunizar a la población mundial; pongamos que lo hacen rápido y en México la vacuna contra el COVID-19 se logra distribuir y aplicar, en el primer semestre del próximo año.
Entonces, si tomamos en cuenta que la campaña para la Gubernatura del estado dará inicio sesenta y tres días naturales anteriores al día de la elección; es decir, el 3 de abril y ésta no deberá durar más de sesenta días, por lo que concluirá el 2 de junio, podemos concluir que las campañas en Querétaro se darían sin vacuna y con la presencia del virus entre la población.
El mismo caso se presentaría en las campañas para diputaciones y Ayuntamientos, pus el mismo artículo indica que éstas darán inicio cuarenta y ocho días naturales anteriores al día de la elección; es decir, el 20 de abril y no deberán durar más de cuarenta y cinco días; es decir, el mismo caso.
Este escenario podría cambiar, si los estudios para el desarrollo de la vacuna se aceleran, lo mismo que los procesos para su producción, distribución y aplicación; sin embargo, se ve complicado.
Imaginen eventos multitudinarios de arranque y fin de campaña, en los que se congreguen miles de personas para apoyar a uno o varios candidatos y que podrían convertirse en foco de dispersión del virus, de un virus para el que probablemente, para ese momento, no habrá vacuna.
Así las cosas, las autoridades locales y electorales, deberán ser sumamente cuidadosas en los acuerdos y disposiciones que emitan para la realización de esas campañas y en los partidos y los candidatos, también deberá caber la prudencia y deberán surgir, entre sus estrategas, ideas innovadoras para hacer campañas de manera diferente. Digo.
El último párrafo
El pleito entre la 4T y el gobernador de Jalisco, huele a intereses puestos en el 2024; Enrique Alfaro ya se vio en las boletas de esa elección y actúa en consecuencia; el gobierno federal, su partido y sus huestes atacan al jalisciense y ambos bandos se enfrascan en una bronca que a quienes perjudica es a la población de Jalisco y a la del país que ve a sus autoridades distraídas en pleitos electoreros. Mal por ambas partes. Les digo.
Quejas, dudas y comentarios: @Paniagua_Fdo