El exdelegado del INAH, Manuel Naredo detalló en entrevista, que las vibraciones producidas por el tránsito pesado en la zona de Los Argos, deberán ser reguladas a mediano plazo, pues pudieran repercutir en el monumento y carpeta asfáltica.
“Tomar en consideración eso, cuidar eso tener un plan a mediano y largo plazo de protección al Acueducto […] de alguna manera tiene que considerarse para a mediano plazo poder tener soluciones que impidan riesgos futuros para el Acueducto», puntualizó.
En cuanto al proyecto de Barrio Santiago, precisó que las oficinas centrales, trabajaron de manera coordinada con la Coordinación Nacional de Monumentos Históricos del INAH en México, quienes otorgaron el visto bueno al proyecto de excavación.
Al final, queda en manos de las oficinas centrales del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), en coordinación con asesores externos el avalar el proyecto de Barrio Santiago.
