El Observatorio Ciudadano de Movilidad (OCM) de Querétaro criticó que las autoridades locales no han tomado medidas para enfrentar el proceso de la nueva normalidad, luego del periodo de confinamiento para evitar la expansión de la pandemia de CPVID-19.
De acuerdo con el Observatorio Ciudadano de Movilidad en Querétaro no se ha realizado ninguna de las acciones que otras ciudades de México y el mundo han implementado, para adaptarse de la manera más adecuada y segura a lo que llamamos “nueva normalidad”.
“Pareciera como si en nuestra área metropolitana, el impacto del confinamiento haya sido nulo y la “nueva realidad” venidera se advierte como igual, si no es que peor a lo que ya conocíamos en materia de movilidad urbana”, señala el organismo.
Asimismo, indica que, si bien, el Instituto Queretano del Transporte (IQT) propone varias medidas para el uso saludable del transporte público, en las calles es posible observar a operadores y usuarios del transporte público sin mascarilla.
“Las denuncias en redes sociodigitales muestran unidades congestionadas; rutas canceladas y largos periodos de espera, asociadas a las bajas frecuencias de paso cuando debería ser lo contrario. La situación pone a revisión el modelo de concesión, ya que el transporte público es la columna vertebral de la movilidad urbana, un servicio esencial para la ciudad y como tal ha de ser garantizado por el Estado”, indica el organismo.
Incluso, afirman que, pese a la recomendación de mejorar la infraestructura peatonal, la medida se ha ignorado justamente en aquellos lugares de alta concentración de personas, como áreas perimetrales a los mercados municipales.
Además de que se ha seguido ignorando el objetivo de ampliar las banquetas para favorecer el distanciamiento social y se sigue dejando de lado el cierre de calles al tránsito vehicular en lugares comerciales para favorecer el desplazamiento de personas a pie y en bicicleta, una medida que, dicen, ha demostrado incrementar las ventas entre 60 y 300% en las ciudades donde se ha implementado, resultando pertinente para reactivar la economía local.
De igual manera señalan que el caso de infraestructura ciclista tampoco ha sido atendido, pues a pesar de que ya van tres semanas de reactivación económica, el automóvil particular sigue acaparando el espacio público, con todas las externalidades negativas asociadas al mismo: contaminación ambiental y auditiva, congestionamiento y estrés vial, gasto de mantenimiento en vialidades y bacheos, subsidios a la tenencia, alta siniestralidad.
“La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda la bicicleta como el vehículo más adecuado para mantener el distanciamiento social, al tiempo que favorece la activación física. Sin embargo, en Querétaro las ciclovías permanecen en el abandono: sucias, anegadas, invadidas o ya inexistentes. No tenemos ciclovías emergentes y tampoco alicientes para el uso de la bicicleta; por el contrario, las decisiones de las autoridades siguen favoreciendo el automóvil por sobre cualquier otro medio de desplazamiento, como lo muestran el Viaducto Poniente y el Estacionamiento Metropolitano en pleno centro de la ciudad (Distrito Alameda).
“No podemos perder la oportunidad histórica de tener una mejor movilidad, una que ponga a las personas en el centro de las políticas públicas. Exhortamos a las autoridades estatales y municipales de Querétaro a resguardar la salud de sus habitantes en esta pandemia y que aprovechen la contingencia provocada por el COVID19, para colocarnos a la par de las ciudades más avanzadas en el orbe. El siglo XXI camina hacia ciudades auténticamente humanas, ocupadas por personas y no como sitios de traslado y guarda de automóviles”, indican.