Las «Águilas» de Filadelfia lograron una de las victorias más contundentes en la historia del Super Bowl al vencer 40-22 a los 2Jefes» Kansas City, frustrando el intento de Patrick Mahomes de conquistar un tercer título consecutivo en Nueva Orleans.
La defensa de los Eagles anuló a Mahomes, quien tuvo una de las actuaciones más erráticas de su carrera. El quarterback de Kansas City, que buscaba igualar las cuatro coronas de Joe Montana, sufrió dos intercepciones clave que dejaron a su equipo contra las cuerdas desde la primera mitad.
El marcador llegó a estar 34-0 en favor de Philadelphia, una debacle que golpea la dinastía liderada por Mahomes y Travis Kelce. En las gradas, Taylor Swift apoyó a su pareja, pero no pudo evitar la caída de los Chiefs, que suman cuatro títulos en su historia, tres de ellos con Mahomes al frente.
Jalen Hurts, quien en 2023 quedó a un paso de la gloria, esta vez impuso condiciones con 221 yardas aéreas, dos pases de anotación y un ‘touchdown’ por tierra. «Aprendí de la experiencia pasada. La defensa gana campeonatos», afirmó el mariscal de campo de Philadelphia.
El presidente Donald Trump se convirtió en el primer mandatario en ejercicio en asistir a un Super Bowl. Al ser enfocado en las pantallas gigantes, recibió una ovación mayoritaria. Durante el evento, sostuvo un encuentro con familiares de las víctimas del atentado del 1 de enero en Nueva Orleans.
En contraste, Taylor Swift fue abucheada por un sector del público al aparecer junto a la rapera Ice Spice. La cantante ha expresado su apoyo a Kamala Harris en la contienda presidencial, lo que ha generado fricciones con los seguidores de Trump.
El espectáculo de medio tiempo estuvo a cargo del rapero Kendrick Lamar, quien contó con la colaboración de SZA y una inesperada aparición de Serena Williams. Antes del partido, Lady Gaga ofreció un concierto improvisado en Bourbon Street como homenaje a las víctimas de recientes tragedias en Estados Unidos.
El partido quedó definido desde la primera mitad. Hurts conectó un pase de 27 yardas con Jahan Dotson y luego corrió una yarda para el primer touchdown. Mahomes, bajo presión constante, sufrió una intercepción del novato Cooper DeJean, quien regresó el balón 38 yardas hasta la zona de anotación.
La diferencia de 24-0 al medio tiempo era la mayor en la historia del Super Bowl sin una remontada posterior. Con un pase de 46 yardas a DeVonta Smith, Hurts puso el 34-0, sentenciando la noche para los Chiefs.
Aunque Kansas City logró reducir la brecha con anotaciones tardías de Xavier Worthy y DeAndre Hopkins, el daño estaba hecho. Los Eagles celebraron su segundo título en la NFL, dejando claro que la revancha, al final, fue suya.
