La vida de la ciudad ha cambiado a pasos agigantados, tal como lo han hecho las nuevas tendencias y generaciones, llevando lo tradicional a modelos de vida y de negocio muy diferentes a lo que conocíamos anteriormente.
Uno de estos cambios recae especialmente en la manera en que comíamos en las calles, hoy en día, salir a “clavar el diente” como coloquialmente algunos le llaman, es asimilar nuestra ciudad y su diversidad, sumergirse en ella a través rincones que rompen la cotidianidad y nos arrojan a un rico cúmulo de opciones posibles, la comida en las calles es, ante todo, cultura cuando se produce o crea, cuando se prepara o transforma y cuando se consume o elige.
Muestra fiel de esta idea es la gran migración que ha tenido el “changarrito tradicional” e incluso algunos restaurantes más “formales”, adaptándose a un formato que si bien, no es nuevo, en México ha tomado fuerza recientemente, se trata de los llamados Food Trucks, que han tenido crecimiento exponencial muy importante, aunque no está por demás decir que, en la materia, aún estamos en pañales en comparación con otros países.
Rapidez, sabor y precios competitivos son las cualidades que todo Food Truck debe tener, pero no es eso lo que los define, hoy en día estas cocinitas andantes se han caracterizado por buscar la excelencia y lo gourmet, lo que los diferencia en gran medida de un puesto tradicional de calle, adaptándose a las rápidas tendencias que mueven hoy en día a una juventud que está divida entre el trabajo y el estudio, y salen a las calles en busca de lo “trendy” sin dejar de lado la satisfacción de sus gustos y necesidades.
En Querétaro existe un hueco legal difícil de llenar, que limita a los Food Trucks a los grandes eventos y contrataciones particulares, dejándolos sin la posibilidad de circular de manera libre, sin embargo, algunos han logrado encontrar la fórmula para establecerse en algún punto y llevar lo mejor de su cocina hasta donde se encuentran los más exigentes comensales, según nos cuenta Erick Rivera, propietario de la Huerta de Carlota y miembro de la Food Trucks Querétaro Asociación.
“Es difícil decir cuáles son los mejores puntos de la ciudad, porque nosotros no andamos realmente en la calle, hace falta que nos regulen, aun así, la gente a nosotros nos busca por nuestra oferta 100 por ciento saludable y así hemos llegado ya al año y medio de tener este camión que realmente se ha convertido en una extensión de nuestro local”.
La clave de la permanencia a decir de Erick en este nuevo y competido nicho de mercado, recae en el excelente servicio y en no perder de vista que no por ofrecer comida gourmet debes dejar de lado los precios competitivos, no sin antes agregarle un toque de excelente actitud.
La Food Trucks Asociación de Querétaro, la componen formalmente alrededor de diez camioncitos de todo tipo de comida; sin embargo, no son los únicos que circulan en la ciudad y su misión es organizarse en la búsqueda de los mejores eventos y las mejores condiciones de trabajo, para poder seguir ofreciendo sus productos en las calles, contribuyendo al vibrante ritmo citadino lleno de cultura y sabor.