-Acusa a ex rector de la UAQ, Gilberto Herrera, de no haber defendido la educación y de no haber gestionado recursos suficientes para las universidades públicas
La falta de avances en el proyecto de la presa del Batán ha desatado críticas por parte de Martín Arango, presidente del Comité Directivo Estatal del PAN en Querétaro, quien cuestionó el interés del gobierno federal en priorizar la inversión en infraestructura hidráulica para el estado. Las declaraciones surgieron tras los comentarios de Andrea Tovar, presidenta de la Mesa Directiva del Congreso local, quien insinuó que esta obra podría no ser una prioridad para el gobierno federal encabezado por Morena.
Arango calificó de “triste realidad” la posibilidad de que el gobierno federal no considere importante un proyecto que busca garantizar agua para Querétaro. Afirmó que si no existe interés por parte de la federación para invertir en obras que beneficien a la ciudadanía, lo mínimo sería evitar discursos contradictorios.
“Es una postura muy hipócrita de cualquier actor político de Morena que salga a hablar del agua mientras no generan las condiciones necesarias para que todos los queretanos tengamos acceso al recurso,” señaló.
El dirigente panista también lamentó que, a pesar de las promesas de la presidenta Claudia Sheinbaum de apoyar a Querétaro, no se hayan destinado recursos para proyectos como la presa del Batán. Aseguró que su partido continuará insistiendo para que el gobierno federal cumpla con sus compromisos, subrayando la importancia de obras hidráulicas para el desarrollo del estado.
En un tono contundente, Arango cuestionó la cohesión y dirección de Morena en Querétaro, señalando que el partido opera bajo intereses personales y no ciudadanos.
“Morena está cada día más fragmentada porque sus líderes buscan beneficios propios, dejando de lado a la gente. Pretenden engañar a los ciudadanos con discursos repetitivos y narrativas falsas sobre temas como la privatización del agua o el supuesto cártel inmobiliario,” argumentó.
El dirigente también arremetió contra figuras como Gilberto Herrera, exrector de la UAQ, acusándolo de no haber defendido la educación ni gestionado recursos suficientes para las universidades públicas. Según Arango, esto refleja una estrategia de Morena para mantener a la ciudadanía en condiciones de dependencia.
“Ellos quieren un pueblo sumiso, mientras nosotros buscamos que la gente pueda aspirar a más: a un carro, una casa, a vivir mejor,” comentó.
El PAN en Querétaro busca contrastar lo que Arango calificó como “grilla y política barata” de Morena, apostando por la unidad social y el trabajo conjunto para resolver problemas estructurales como el acceso al agua. El dirigente celebró los esfuerzos locales por dialogar con diversos sectores, como los artesanos, y enfatizó la importancia de un trabajo colectivo que trascienda colores partidistas.
En relación con el agua, insistió en que las carencias actuales en algunas comunidades de Querétaro son responsabilidad de organismos federales como la CONAGUA y la CFE, pidiendo mayor claridad y acción por parte del gobierno federal.
“Es un discurso tramposo culpar a otros niveles de gobierno cuando es la federación la responsable de estas áreas,” concluyó.
El futuro de proyectos como la presa del Batán y otras obras hidráulicas dependerá de las gestiones entre el estado y la federación, pero por ahora, el debate político sigue dividiendo opiniones en Querétaro.