La producción legislativa no dio lustre a la LXIII Legislatura que recién concluyó. Pero los diputados que se fueron demostraron maestría en despilfarro.
El máximo órgano de administración de la Cámara de Diputados es el Comité de Administración; ahí los diputados aprobaron privilegios y derroches.
En sesión del Comité con fecha del 30 de octubre de 2015, diversos legisladores manifestaron ya contar con un seguro de gastos médicos distinto al contratado por la Cámara.
Sin embargo, en lugar de renunciar a dicha prestación, pidieron al Comité que la Cámara pagara sus seguros privados con cargo al erario.
Dos días antes, el 27 de octubre de 2015, el Comité acordó pagar 180 mil pesos por reposición de equipos porque durante 2014 “generaron diversas pérdidas de equipos” asignados a los Grupos Parlamentarios y Comisiones Legislativas.
Celulares que los diputados de la LXII Legislatura y sus empleados siguieron usando al dejar el cargo.
Para cerrar con broche de oro, la Junta de Coordinación Política puso en su plan de trabajo realizar actividades culturales como… ¡la Navidad!
“Por primera vez en la historia de la historia de la Cámara de Diputados” pusieron adornos y encendieron un árbol de Navidad en el patio central del Palacio Legislativo.
Estos adornos significaron una factura de 1 millón 299 mil pesos pagada a la persona moral Plastidec S. De R.L. Gasto aprobado por el Comité en sesión del 12 de diciembre de 2017.
La famosa austeridad se construye con decisiones de todos los días.