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El macuspano en su laberinto

De lleno en el quinto año, momento en que los presidentes mexicanos comienzan a perder poder ante las “cargadas” presidencialistas, el de Andrés Manuel López Obrador ya es todo menos gobierno.

Sin una ruta clara desde un inicio, sólo un catálogo de promesas fantasiosas, y con el único proyecto de conservar el poder a toda costa, la Cuatrote da tumbos ideológicos, económicos, políticos y morales.

En cinco años lo más destacable es el fracaso de sus obras no planificadas y cada día más onerosas, y los desencuentros con países aliados, además del ataque al Estado de Derecho y a todos los sectores productivos de la Nación.

La administración de López Obrador ostenta los terribles récords de homicidios, feminicidios, desaparecidos, muertos por falta de atención médica, periodistas y activistas de derechos humanos asesinados.

Además, escándalos de corrupción, tanto de dependencias y funcionarios de la administración pública central como de parientes consanguíneos y de políticos protegidos del Presidente.

Y lo peor es que los hechos de corrupción de la Cuatrote siempre van seguidos por maniobras para confundir a la opinión pública para poder dotar a los culpables de una patente de corzo.

La militarización del servicio civil para empoderar a las fuerzas armadas y el intento constante de violentar la Constitución dibujan a un gobierno muy alejado del bien común y de la democracia y muy enfocado a la dictadura.

Y si amor con amor se paga, frase consentida del dictador Hugo Chávez, es claro la atención y apoyo que López brinda a los dictadores latinoamericanos y el encono contra países de los que México depende económicamente, tendrá más consecuencias.

Ni por asomo de duda, López se ha dado cuenta que México forma parte del bloque económico y estratégico de Norteamérica y que no es un país del Caribe, ni de Centro o Sudamérica.

Muchísimos mexicanos tenemos algún lazo económico o afectivo en Norteamérica o España, y menos en Latinoamérica. Más aún, hoy, hoy, hoy la estabilidad monetaria depende de las remesas familiares, pero AMLO no ve esta realidad

¿Si los 552 mil millones de pesos del Fobaproa, que beneficiaron a miles de deudores, fue “el robo del siglo”, cómo ha de llamarse a agotar tres veces más en ahorros, fideicomisos y hacer deuda para repartir dinero y pagar infraestructura inservible?

Toda la administración pública va en franco deterioro, especialmente en las áreas que son indispensables para la buena marcha y la equidad, como salud, educación, empleo y especialmente, seguridad pública.

El gobierno carece de seguridad digital, la administración pública es hoy más ineficiente que nunca, y además se ha dejado crecer a la delincuencia organizada de tal manera, que la aprehensión de un narco paraliza tres estados.

Y peor, todo indica que el operativo contra la DO más importante en todo el sexenio ni siquiera le fue consultado e incluso, no sería aventurado decir que el mismo Secretario de la Defensa no supo que iban por Ovidio Guzmán.

Hasta hoy, AMLO, no ha adoptado medidas de protección eficaces frente a las acciones de particulares que vulneran el derecho a la vida, a la libertad y al libre tránsito de los gobernados, y por eso ya no es un gobierno.

Hay datos claros de que el partido en el poder ha pactado con la delincuencia organizada el financiamientos de campañas y el acarreo de votantes para beneficiar a candidatos de Morena, muchos gobernadores que siguen vinculados a la DO.

Así que llegamos al Año del Conejo, con otro conejo que está perdiendo el poder, que corre comprando cara la popularidad y que ya va en caída libre, mientras sigue desgobernando al país.

Un Gobierno es el conjunto de órganos e instituciones que controlan y administran el poder del Estado y, un Ejecutivo que lejos de facilitar la labor de otros poderes e instituciones, las estorba, y provoca el caos, deriva en Estado Fallido

Sobre las mentiras presidenciales con las que por cinco años ha tratado de dibujar su utopía y conservar como bien primordial su popularidad, AMLO ahora confiesa que su política social tiene la finalidad de comprar votos.

Decía mi abuela que los niños dicen lo que hacen, los viejos lo que hicieron, y los pendejos lo que van a hacer. Y López claramente dice que cuenta con el voto de los obsequiados con dinero público para que Morena gane en 2024.

Y a esa confesión no pedida, pese a que era un secreto a voces, se suman “gastos de imagen”, como aceptar que México sea “tercer país seguro” para que el Air Force One de Joe Biden le haga el favor a su imagen y aterrice en Santa Lucía.

Y ese compromiso que asume el macuspano a cambio de un empujón a su popularidad y la de Biden, costará a los estados fronterizos 360 mil migrantes no mexicanos anuales en lista de espera, sin apoyo económico ni logístico.

El anuncio de Joe Biden de que México recibirá 30 mil migrantes al mes no mexicanos, que hayan sido deportados de Estados Unidos, es muestra de que Andrés Manuel López Obrador se volvió a doblar.

¿Qué sigue en esta comedia de las equivocaciones que la Cuarta nos hace vivir a todos? Hoy, hasta el tal Díaz Ordaz se extraña.

User007@mxpress.mx

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