Los años pasan y la temporada de lluvias sólo tiene una constante en la ciudad: los baches. Sin embargo, las fallas de las autoridades para evitar el mal estado de las calles también representa beneficios para un oficio en particular.
Las vulcanizadoras tienen un incremento considerable de trabajo en temporada de lluvias, puesto que las llantas y los rines de los vehículos son las partes más afectadas por caer en los baches.
“Llegan de todo, muchos rines, llantas, en todas las llanteras llegan, es que hay muchos baches, yo digo que cuando hacen reencarpetado o luego los tapan, pero es de muy mala calidad, porque hay lluvias otra vez y salen los hoyos”, comentó el talachero Pepe que trabaja en la Vulcanizadora Pérez.
Una vulcanizadora pequeña, en promedio atiende de 10 a 15 autos que se dañan por culpa de los baches que salen constantemente en las calles de la ciudad, principalmente los autos pequeños, cuyos rines son delgados y pueden llegar a dañarse, son los más afectados aunado a la falta de precaución de los conductores.
“La mayoría que atendemos son por picadura, pero por baches en temporada de lluvias sí nos llevamos fácil de 10 a 15 llantas o rines de fierro que sí los podemos enderezar aquí mismo o algunos que sí los tenemos que llevar a arreglar, pero es por la temporada de lluvias que sí hay mucho, luego baja un poco. También la gente en esta temporada es muy imprudente, le dan (manejan) a la misma velocidad y los baches están tapados, están los charcos y no se ven, se han incrementado muchos”, destacó.
20 años de reparar llantas
A tan solo una cuadra de Constituyentes en la colonia Mariano de las Casas, la vulcanizadora Pérez tan solo en un lapso de 15 minutos, logra atender a 3 vehículos que llegan con las llantas dañadas, dos de ellas por picaduras y uno más por baches.
Uno de los vulcanizadores, Pepe conoce la rutina para reparar las llantas a la perfección. Más tarda en estacionarse el vehículo, que el tiempo en que ya está flotando en uno de sus extremos gracias al gato hidráulico que ya ha sido colocado y apalancado por Pepe.
Como si fueran pits de una competición, los virlos son removidos uno a uno por una llave de cruceta y la llanta desprendida del ring con una palanqueta para ser reparada. Lleva más de 20 años en el negocio familiar que su padre inició 10 años antes de que él cambiara su primera llanta.
“Llevo yo más de 20 años, pero el negocio lo abrió mi papá hace 29 o 30 años, estamos un poco escondidos pero mucha gente nos conoce y nos recomienda y pues como cada vez son más carros, cada vez hay más chamba, aunque como todo, hay temporadas que baja”, dijo.
Vulcanizadora Pérez 2163349 servicio móvil
Tan solo en el 2017 el municipio de Querétaro reportó un incremento de hasta 400% en el número de quejas por baches.
